/Sandra Manzanares/
A Bill Viola “le interesa despertar el alma”, éste es un rasgo que caracteriza los trabajos seleccionados en la muestra ‘Vía Mística’, invitando a través de la disciplina del videoarte a “hacer un alto en el camino, detenerte y dejarte sorprender, descubrir el mínimo detalle y hacer una reflexión sobre los temas que propone”. De esta manera, Viola consigue sumergir al visitante en la paz de la espiritualidad y el misticismo.
El prestigioso artista norteamericano Bill Viola sorprende con 16 obras cargadas de fuerza expresiva en sus contenidos más transcendentes y místicos, reflejando una gran carga simbólica de la mano de un soporte tan actual como el vídeo, y aportando a su vez, una visión diferente de un lenguaje artístico clásico. “El lenguaje que utiliza es moderno”, aunque Viola es considerado un artista “clásico por el tema y el trabajo con la figura humana, que forma parte de toda la iconografía y es fuente de expresión, al estilo de los grandes maestros antiguos”, explica a El Digital de Albacete la comisaria de la exposición, Carmen Olivié.
Y es que, Viola se ha convertido en uno de los pocos artistas actuales en abrirse paso entre grandes audiencias explorando temas de gran profundidad, que se consideran universales como el nacimiento, la muerte, el amor o el dolor. La temática espiritual y las referencias explícitas a la muerte y al tránsito del alma forman parte del interés del artista por el misticismo, la filosofía y la religión, trabajando la introspección, indica Olivié, añadiendo que la de Viola es una expresión artística “muy interesante”, ya que el videoarte encaja a la perfección con el atractivo que despierta la imagen en las generaciones de hoy en día, acostumbradas a estos formatos.
Viola ha ido a contracorriente porque las temáticas del videoarte suelen “ser más rompedoras”, indica Olivié, resaltando que usualmente se enfocan a temas de denuncia, mientras que él se preocupa por plasmar las grandes preguntas de la humanidad en su obra. El artista es un gran conocedor de la obra de San Juan de la Cruz y ha profundizado a lo largo de su vida en las filosofías orientales y el autoconocimiento. “El arte es para mí el proceso de intentar despertar el alma, porque vivimos en un mundo industrializado y acelerado que prefiere que el alma permanezca dormida”, ha mencionado el artista.
La selección de las comisarias de la exposición busca plasmar precisamente la intención de Viola de parar a reflexionar y alejarnos por unos momentos de ese “mundo industrializado”. Sus instalaciones en cámara lenta y ultra definición atraen a grandes multitudes en todo el mundo, algo que se adereza con una puesta en escena técnicamente perfecta y una dirección artística capaz de generar espacios expositivos impactantes, estableciendo un diálogo extraordinariamente estético y dramático de las videoinstalaciones con los espacios que las acogen.
Con un arranque “muy bueno”, la muestra ya ha sido visitada en menos de un mes por 7.000 personas, obteniendo la aceptación de los críticos expertos, aunque no es necesario ser un entendido en la materia para apreciar el arte de Viola, ya que como nos explica Olivié, la muestra “es muy accesible porque es figurativa”, con imágenes de “gran belleza que te captan e hipnotizan” y producen una “sensación de relax ideal para una sociedad tan frenética”, destaca la comisaría que invita a visitar ‘Vía Mística’ para descubrir “el placer de mirar y observar”, para después, sacar sus propias conclusiones.
Y es que, ‘Vía Mística’ es una una oda al misticismo, realidad que, uniendo tradición y modernidad, forma un todo que también diferencia el carácter de Cuenca. Las antiguas iglesias de San Miguel, San Andrés, Las Angélicas y el Museo de Arte Abstracto Español son el escenario de una exposición que marcadamente espiritual, con algunas obras inspiradas en la iconografía religiosa de grandes maestros antiguos.
