Agentes del Destacamento de Fiscal y Fronteras de la Comandancia de la Guardia Civil de Albacete han investigado a un hombre de 41 años, residente en la capital albaceteña, como presunto autor de un delito contra la propiedad industrial. La investigación se inició tras la localización de un envío postal a su nombre que contenía 40 relojes de pulsera que imitaban marcas de alta gama, como Rolex y Cartier.
Control rutinario en empresas de paquetería de Albacete
Durante una inspección rutinaria dentro de sus funciones de vigilancia sobre mercancías en empresas de paquetería, los agentes detectaron un paquete sospechoso. Su apariencia levantó sospechas sobre un posible intento de introducir productos falsificados en el mercado, vulnerando los derechos de propiedad industrial.
Una vez abierto el paquete, conforme a la normativa vigente, los agentes comprobaron que contenía varios relojes que carecían de documentación legal que acreditara su origen. Los artículos, cuidadosamente elaborados para imitar logotipos y detalles de reconocidas marcas, podrían haber supuesto un fraude estimado en unos 240.000 euros si hubieran sido vendidos como originales.

Confirmación de la falsificación
Tras la incautación, la Guardia Civil contactó con los representantes oficiales de las marcas afectadas. Estos han confirmado su intención de personarse en el procedimiento judicial, aportando informes periciales que acreditan la falsedad de los productos intervenidos.
Las diligencias instruidas, junto con los relojes incautados, han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de Albacete, que se ha hecho cargo del caso. La actuación se tipifica como un delito contra la propiedad industrial, recogido en el artículo 274 del Código Penal.

Lucha de la Guardia Civil contra el mercado de falsificaciones
Esta intervención se enmarca dentro de los controles habituales que la Guardia Civil realiza para combatir el comercio de productos falsificados, conforme a la Ley 17/2001 de Marcas y el Reglamento (UE) 608/2013 sobre protección de los derechos de propiedad industrial.
La Guardia Civil recuerda la importancia de este tipo de operaciones para proteger tanto a los consumidores como a las marcas legítimas, especialmente en épocas festivas o mercados locales, donde este tipo de productos suelen aparecer con mayor frecuencia.