Muchas veces te habrás planteado la cuestión de cómo podrías mejorar algunos aspectos de tu persona. Este cambio puede estar orientado tanto a tu vida personal como a tu desarrollo laboral. A este proceso se le denomina crecimiento personal, y en este artículo te daremos algunas claves para que lo logres de la mejor manera posible.
¿Qué es exactamente el crecimiento personal?
Como ya sabrás, todas tus habilidades pueden entrenarse para alcanzar un mayor desempeño en ellas. Los aspectos personales no serán diferentes. El crecimiento personal consiste, en primer lugar, en conocerse a uno mismo para descubrir cuáles son tus habilidades y qué aspiraciones o sueños pretendes alcanzar con ellas. O, dicho de otra manera, conocer tu verdadera identidad.
La clave estará en potenciar dichas habilidades y características propias para lograr un mayor bienestar no solo contigo mismo, sino con el mundo y las relaciones que te rodean. Es más, varios autores incluso ven en el crecimiento personal un paradigma necesario para el desarrollo del mundo empresarial y de cualquier trabajador.
A priori este proceso puede parecer sencillo, pero lo cierto es que en muchos casos llevará toda una vida y el camino muchas veces no será sencillo. Habrá desvíos y requerirá de tiempo y esfuerzo, pero los beneficios merecen la pena. En tu mano estará cuánto decides invertir para alcanzarlo.
El primer pilar del crecimiento personal es hacerte preguntas
Si quieres alcanzar un desarrollo personal pleno, lo primero será pararte a observar cómo te relacionas contigo mismo y con los demás. Al observar primero quién y cómo eres, podrás empezar a reflexionar sobre qué aspectos te gustaría cambiar o cuáles necesitan ser mejorados. Es importante matizar que no se trata de intentar ser otra persona, se trata de lograr alcanzar la mejor versión de ti mismo. Este primer paso es el pilar porque no tendrá sentido cambiar si no quieres hacerlo.
Además, examina tus metas en la vida y pregúntate si te estás encaminando hacia ellas o las estás dejando de lado. Puede que la última vez que pensaste sobre este tema tus metas fueran otras, o puede que al hacerte consciente de ellas sientas que debes cambiarlas. En cualquier caso, las preguntas clave serán “quién eres”, “qué quieres” y “por qué lo quieres”. En base a esas preguntas, podrás empezar a trabajar en qué aspectos puedes cambiar primero.
Respecto a las relaciones con los demás, es importante tenerlas en cuenta porque serán un buen indicativo de cómo te muestras al mundo. No solo te ayudarán a conocerte mejor, sino que te harán reflexionar sobre si esa es la manera en la que quieres ser visto o de si estás valorando realmente dichas relaciones.
Ser consecuente con los actos, clave para el desarrollo personal
Una vez tengas las respuestas y seas más consciente de quién eres, cuáles son tus metas y qué habilidades tienes para alcanzarlas, tocará examinar tus errores. Es un punto difícil dado que muchas veces tendemos a buscar culpables fuera de nosotros mismos. Pero si quieres alcanzar el crecimiento personal, tendrás que hacer autocrítica y aceptar tus errores y la responsabilidad de los mismos. Este punto será vital porque te movilizará hacia la acción y a tomar las riendas de tu vida.
Ser consecuente con tus actos es tomar la decisión que tú quieras aceptando plenamente sus consecuencias. Lo más probable es que cometas fallos, pero el asumirlos te hará aprender de ellos y evitarlos en el futuro. Es empoderarte, porque te pone al frente de tu vida y te hace crecer como persona.
Experimenta todo lo que puedas
En este punto tocamos un cliché, el de salir de la zona de confort. ¿Por qué es importante en el crecimiento personal? Sencillamente porque expande tus horizontes y te hace plantearte cuestiones o proponerte metas que antes no tenías en mente. El quedarte anclado en tu zona de confort por miedo a lo desconocido solo retrasará tu proceso de desarrollo personal. Si has logrado llegar a un punto en el que conoces tus habilidades y quién eres, tendrás que empezar a confiar en ellas y en ti mismo.
No será fácil, de hecho, gran parte de la ansiedad que siente la gente hoy día es fruto de estar habituado a una rutina en la que no tienen que confrontar ninguna de sus ideas, plantearse ninguna cuestión o superar ninguno de sus límites. Si quieres alcanzar el crecimiento personal no puedes ir en piloto automático. Tienes que enfrentarte a retos nuevos y crecer como persona conforme lo haces.
La psicología, una gran aliada
Por fortuna, la salud mental está cada vez menos estigmatizada. Es posible que quieras alcanzar un desarrollo personal, pero sientas que hay algo importante que te lo impide. Puede que en este proceso necesites algo de ayuda externa y, en ese caso, la psicología podrá echarte una mano. Existen trastornos cada vez más comunes, o más visibilizados, y con una prevalencia alta como es la depresión, que hacen muy difícil iniciar este camino. No temas consultar a un experto, puede que en algunos casos el primer paso para alcanzar el crecimiento personal sea pedir algo de ayuda externa.
