Condenado un funcionario del Ayuntamiento de Yeste

/Redacción/

La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Albacete ha condenado a un trabajador del Ayuntamiento de Yeste como autor de un delito de falsedad en documento oficial cometida por funcionario público a la pena de 1 año y 9 meses de prisión, multa de 600 euros y un año de inhabilitación para el desempeño de cargo alguno en la Función Pública que implique administración y gestión de dinero público. Del mismo modo, la sentencia establece para la misma persona por un delito intentado de malversación de caudales públicos la pena de 3 meses de prisión, multa de 150 euros y 3 meses de suspensión de empleo o cargo público. 

Dicha sentencia señala además que se acuerda la suspensión de la pena de prisión de 24 meses impuesta al penado por un periodo de 3 años condicionada a que no vuelva a delinquir durante este periodo de tiempo, de lo contrario se revocaría la suspensión. 

Hechos probados 

La sentencia de la Sala establece como hechos probados, así se declara por conformidad entre las partes, que en Yeste (Albacete) a mediados del mes de febrero de 2013, el acusado, tras disfrutar de un periodo de excedencia voluntaria en su puesto de trabajo como personal laboral indefinido no fijo del Ayuntamiento de Yeste, se incorporó a sus funciones y “aprovechando el ejercicio de su puesto de trabajo en ‘Gestión de nóminas, personal y tributos’, entre cuyas funciones se encontraba la confección de nóminas, procedió a alterar su nómina correspondiente a los 15 días trabajados en el mes de febrero de 2013, aumentando injustificadamente los importes a percibir”. 

Así, sigue desgranando la sentencia, “alteró su categoría profesional y su grupo de cotización a la Seguridad Social, pasándolo del grupo 5 al 3, e hizo constar como salario base 698,52 euros cuando realmente le correspondían 605,66 euros; y 155,02 euros en concepto de ‘complemento de especial responsabilidad’, cuando le correspondían 113,91 euros, haciendo constar de esta manera como total a percibir 940,57 euros brutos (703,23 euros líquido) en lugar d los 806,60 euros brutos (636,08 euros líquido) que le correspondían”. 

Continua desgranando la sentencia que el secretario del Ayuntamiento de Yeste detectó la “irregularidad” y “rectificó” la nómina haciendo constar en ella el “verdadero grupo de cotización a la Seguridad Social” al que pertenecía el acusado y el importe del salario que le correspondía. 

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3 comentarios

  1. Dado que hay muchos rumores respecto a la “malversación de fondos públicos” en el Ayuntamiento de Yeste, me veo obligado a escribir estas líneas. Es cierto que yo, Nicolás Juárez García, he sido condenado en firme a 24 meses de prisión por la Audiencia Provincial de Albacete, en el procedimiento de Jurado iniciado por la Fiscalía, a Denuncia del Ayuntamiento de Yeste, al reconocer el intento de malversación de caudales, que asciende a 133 euros y de falsificación de documento públicos. La condena implica además otras sanciones menores.

    Se me ha juzgado por un error, totalmente involuntario, en el desarrollo de mi trabajo como Auxiliar Administrativo en el Ayuntamiento. Tan involuntario que, el mismo día que se produjo lo puse en conocimiento de la Sra. Alcaldesa (anterior a la actual) y lo corregí yo. Desmiento que, tal y como se ha publicado en la sentencia fuera el Secretario del Ayuntamiento quién detectó y corrigió el error. Según esa información parece que todo está muy liado, que se cometen muchos errores. La respuesta está en que trabajamos con programas informáticos codificados, y que con solo cambiar un código se modifica la programación, de ahí que parezca que se cometieron distintos errores, pero en realidad solo fue uno: definición de un código informático. De resultas de todo no ha habido ni un céntimo de quebranto para el Ayuntamiento, ni dañado su credibilidad institucional.

    ¿Y entonces por qué he reconocido mi culpabilidad?: Tan solo, para evitar males mayores. La petición del Fiscal era de cuatro años de prisión, además de otras penas de menor importancia. Aunque mis abogados preveían que el juicio lo ganaríamos casi con toda seguridad, me aconsejaron que antes de llegar al juicio oral con jurado popular, aceptara reconocer la culpabilidad a cambio de rebajar de cuatro años a solo dos años de prisión, dado que al carecer de antecedentes penales no tendré que cruzar la puerta de la cárcel. Ante esta situación, y visto que ni el Sr. Secretario, ni la Sra. Alcaldesa (la actual), ni los Sres. Concejales en el Pleno, ni el Sr. Fiscal habían creído mi inocencia pensé “cómo es posible que esté en riesgo de ser condenado a cuatro años de cárcel por un acto totalmente involuntario “, y opté, no sé si acertadamente, a declararme culpable.

    Me gustaría creer que tanto el Sr. Secretario, como la Sra. Alcaldesa, como los Sres. Concejales ignoraban las consecuencias que años más tarde iban a tener su actuación.

    Me gustaría creer que no midieron el sufrimiento que para mí y mi familia nos iba a suponer ver mi dignidad y mi honradez cuestionada por mis paisanos.

    Me gustaría creer que no les movió ningún otro interés y hoy pueden dormir tranquilos.

    Me gustaría creerlo pero no puedo. Más bien siento que odio, ignorancia y cobardía son los hilos que han movido la marioneta.

    Es sabido que llegados los momentos críticos muchos “amigos” desaparecen de nuestro lado como por encanto, por eso quiero aprovechar para agradecer desde aquí a mi familia su apoyo incondicional y a mis amigos la confianza que me han demostrado y que sirve para fortalecer mi dignidad. Es por ellos y para ellos para quién va esta explicación, aunque no me la hayan reclamado. Gracias de todo corazón.

    Nicolas Juarez Garcia

    1. Sr. Nicolas

      En 2005 realizó la misma maniobra de subirse la categoría y sueldo, sin autorización.

      Usted ya había sido concejal y diputado provincial (1995-99) por lo que conocía que el procedimiento requería un acuerdo del Pleno del ayuntamiento, que no existía.

      Advertido de la irregularidad y de que esa modificación no estaba autorizada, denunció usted al ayuntamiento esperando que le dieran la razón. Pero no fue así y tuvo que devolver lo cobrado indebidamente.

      Posteriormente solicitó excedencia de la que regresó en enero de 2013.

      A su regreso de la excedencia al ayuntamiento de Yeste, volvió a repetir la misma irregularidad.

      Dado el precedente, al secretario no le quedó otro remedio que iniciar un expediente informativo de los hechos que han dado lugar a la actual sentencia.

      Y no ahondaremos en detalles porque no es cuestión de hacer leña del árbol caído, pero tampoco de admitir esa versión de víctima que usted ha dado.

      Sinceramente, a muchos (me incluyo) nos da pena por lo que ha hecho sufrir a tantas personas buenas de su entorno.

      Pero tanto ellas como usted son víctimas de usted mismo.

      Joaquín Altuzarra
      Alcalde de Yeste en 2003-07

    2. Me parece una barbaridad absoluta que se llegue a condenar a alguien por algo que se ve a leguas que es un error, quién querría estafar poco más de 100€? En serio? Todo mi apoyo, Nicolás.

      Nacho Saladrigas Mañas.

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