/Marta López/Fotos: Víctor Fernández/
El Obispado de Albacete ha acogido este miércoles la presentación de la Plataforma ‘Libres para educar a nuestros hijos’. Es una iniciativa inspirada por las cinco Diócesis de la Provincia Eclesiástica de Toledo integrada por padres y madres y miembros de la comunidad educativa que tiene como finalidad dar a conocer a la sociedad las implicaciones derivadas del derecho fundamental a la educación, consagrado en el artículo 27 de la Constitución Española.
Desde la plataforma ‘Libres para educar a nuestros hijos’ reivindican los derechos y libertades que integran la libertad de educación y la enseñanza. “No se trata de atacar los derechos y libertades de otros colectivos sociales, sino que se trata de que se respeten nuestros derechos”, señalan desde la propia plataforma.
El director del Colegio Diocesano de Albacete, Enrique Encabo apuntaba que este año se cumple el 70 aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos, que “surgía para evitar en lo sucesivo los abusos habías supuesto las grandes ideologías del siglo XX, donde desde el Estado se pretendía adoctrinar y formar las consciencias de las futuras generaciones”.
Además, en la propia Constitución española se recoge el derecho de los padres a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos, según sus convicciones religiosas y morales, y es que “la educación forma uno de los pilares fundamentales sobre los que sustentan los cimientos de la libertad de una sociedad que se denomina democrática”, apuntaba Encabo. La educación es en la actualidad un debate abierto a nivel nacional y regional, “y habrá que preguntarse si lo que se pretende es seguir el aire de libertad de la gran transición mundial, o volver a las dictaduras que ya parecían educadas en Europa”, subrayaba el Director del Colegio Diocesano.
La plataforma ‘Libres para educar a nuestros hijos’, se desarrolla en torno a cinco pilares básicos que abarcan desde el propio derecho a la educación, pasando por la libre elección del modelo educativo, o incluso el derecho de participación.
El encargado de dar voz al primero de estos derechos ha sido el catedrático de la Universidad de Castilla-La Mancha José Javier Orengo. El derecho a la educación como derecho fundamental, que aparece “consagrado en nuestra Constitución en el artículo 27 y tiene como titular a los ciudadanos, no al Estado”. “El derecho a la educación lleva consigo cosas tales como la elección del modelo educativo, la elección de la enseñanza religiosa y moral acorde con las convicciones de los padres, y el derecho a la participación tanto en la gestión como en los programas educativos”, destacaba el docente. Además, en lo relativo a la libertad de enseñanza, el Estado juega un papel fundamental, “en cuanto que el Estado tiene una obligación de prestar sus servicios a estos centros o modelos educativos que no tienen por qué ser el público necesariamente” indicaba Orengo. El profesor finalizaba su intervención subrayando que son los padres quienes “tienen el derecho de educar religiosa y moralmente a sus hijos, no es el Estado, el titular es el ciudadano”.
El segundo de los derechos que defienden desde ‘Libres para educar a nuestros hijos’ es el derecho a la libre elección del modelo educativo, quien ha defendido Rosa Castro-Girona CONCAPA, la representante de las AMPAS de los colegios concertados de Albacete. “La familia es una escuela de vida y a las familias nos toca poner sentido común en esta sociedad tan relativista, es por ello que los padres tenemos la obligación y el derecho de poder elegir el modelo educativo porque nosotros somos los primeros educadores”, indicaba. “El Estado no puede servirse del sistema educativo para adoctrinar a nuestros hijos, somos responsables de la educación de nuestros hijos, es por ello que la escuela es complementaria de la familia y una ayuda”, enfatizaba Castro-Girona, quien añadía que “el Estado tiene que ser libre, progresista y si quiere el bien para la sociedad debe promover y garantizar la libertad de creación de centros docentes y el funcionamiento de los mismos mediante una financiación igualitaria y justa para todos los centros”. “Cada familia tiene un estilo de vida, pues que nos dejen elegir el estilo que queremos cada uno para nuestros hijos”, sentenciaba la representante de CONCAPA.
La representante del Secretariado de Enseñanza religiosa, Elvira Navarro, ha sido la encargada de poner de relieve el derecho a elegir la enseñanza religiosa. “Partiendo de que España es un Estado democrático y acofensional, el Estado tiene derecho de favorecer y asegurar la asignatura de religión y la libertad de elegir fomentando el pluralismo social” destacaba Navarro.
“Esta asignatura no debe mantenerse en los centros públicos y concertados simplemente por razones jurídicas y laborales, se tiene que mantener porque responde a objetivos de la escuela y objetivos sociales” y es que, Elvira Navarro recoge que “el objetivo de la escuela es la formación integral del alumnado, y el artículo 27 de nuestra Constitución se recoge que la educación es el pleno desarrollo de la personalidad humana”. En Europa, “a excepción de Francia, tienen integrada y asentada la asignatura de religión en el sistema educativo, y en una Europa democrática España no puede ser una excepción” destacaba.
El cuarto de los derechos que defiende esta plataforma es el derecho a educar en conciencia moral, “lo que estamos poniendo en juego es el propio concepto de persona, ¿qué tipo de personas queremos que sean nuestros hijos?, ¿cuáles son los valores y principios que van a orientarles en el comportamiento de cada día en su relación con los demás, en su relación con el ambiente y con la trascendencia religiosa?”, se preguntaba el responsable de la pastoral familiar y vida, Juan Iniesta. “Ser un sujeto moral significa para cada persona ser dueño y responsable de sus propias elecciones, se trata pues de buscar hacer el bien”, explicaba el sacerdote. Además, apuntaba que “los padres como educadores primeros y principales de los menores tienen el derecho y la obligación de transmitir a sus hijos unos valores y unos principios morales, que sin lesionar los de otras personas les ayuden a realizarse como personas en la búsqueda de la verdad”.
La Coordinadora de la plataforma Caridad Navarro destacaba la importancia del derecho a la libre participación, haciendo referencia al artículo primero de los Derechos Humanos en el que se establece que “todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos”. Además, señalaba que desde esta plataforma “se pretende remover obstáculos que puedan impedir el cumplimiento y el ejercicio de estos derechos y deberes fundamentales”. “Nos encontramos con una proliferación de leyes en todas las comunidades autónomas y también a nivel nacional que ponen en peligro estos derechos”, destacaba la coordinadora, quien añadía que “a la hora de participar nosotros como creyentes, no nos podemos separar para participar de mi identidad personal, ni de mi libertad ideológica, ni de mi libertad de conciencia, ni de mi libertad de expresión, ni pensamiento y por supuesto yo no me puedo dejar en casa mi libertad de creencias”.
La plataforma ‘Libres para educar a nuestros hijos’ considera igualmente que “la educación tiene como finalidad generar en el alumnado un proceso de maduración de un ser humano libre y responsable”, quienes a través de un manifiesto publicado en su página web animan tanto a padres como a la comunidad educativa a adherirse a su causa por la libertad de educación y de elección del modelo educativo.
Por una escuela pública y laica.