Albacete, camino de ser un desierto: ya supera a Zaragoza, Madrid o Murcia en suelo degradado

Es la provincia de España con más kilómetros de suelo desertificado

Albacete avanza hacia un escenario ambiental cada vez más comprometido. El Primer Atlas de la Desertificación de España (ADE), elaborado por la Universidad de Alicante en colaboración con el CSIC, confirma con datos contundentes que la provincia se sitúa entre las más afectadas del país por la aridez y la degradación del suelo.

La provincia presenta uno de los niveles de aridez más elevados de España. De sus 14.933 kilómetros cuadrados de superficie total, el 97,8 % se clasifica como zona árida. Dentro de ese porcentaje, la mayor parte -el 81,1 % del territorio- corresponde a zonas semiáridas, mientras que un 16,7 % se considera subhúmedo seco. Solo el 2,2 % de la superficie provincial puede definirse como no árida. 

Con estos datos, Albacete se sitúa como la tercera provincia más árida del país, únicamente por detrás de Murcia y Tarragona, lo que la convierte en un territorio especialmente vulnerable al deterioro del suelo.

Una desertificación muy avanzada

Pero el dato más preocupante llega cuando se analiza la desertificación, es decir, la degradación real del terreno. El Atlas revela que el 86,1 % de las zonas áridas de Albacete -equivalentes a 12.565 km2- están ya degradadas. 

Esto sitúa a la provincia también entre las más afectadas de España cuando se analiza el porcentaje de superficie dañada, con un 84,1 % del total. De hecho, Albacete encabeza una clasificación menos conocida, pero muy significativa. Es la provincia española con más kilómetros cuadrados desertificados, por encima incluso de territorios mucho más extensos como Zaragoza o Toledo.

Este escenario provincial se enmarca en un contexto regional igualmente alarmante. Castilla-La Mancha es una de las comunidades autónomas con mayor proporción de territorios áridos: el 90,5 % de su superficie -71.861 km2- se encuentra dentro de esta categoría. Y de ellos, el 68 % está ya degradado. En conjunto, la desertificación afecta al 61,8 % del territorio regional, una cifra que sitúa a Castilla-La Mancha entre las zonas más vulnerables de España.

El panorama nacional también confirma que el fenómeno no es puntual, ni de unas pocas provincias del sureste. España cuenta con 504.268 km2 de superficie total, de los cuales 337.741 km2 -el 67 %- corresponden a zonas áridas. Y dentro de estas, el 60,9 % está ya desertificado, lo que supone 206.217 km2 en mal estado. Además, el 94,25 % de toda la degradación detectada en el país es desertificación, lo que demuestra que el deterioro está fuertemente concentrado en estas áreas.

Degradación del terreno 

El Atlas señala especialmente a la Región de Murcia como la comunidad autónoma con mayor porcentaje de degradación, alcanzando un 91,4 % de su superficie. Le siguen la Comunidad Valenciana, con un 73,7 %, y la Comunidad de Madrid, con un 68,9 %. 

A nivel provincial, Alicante lidera el listado de territorios más degradados con un 94 % de su superficie afectada, seguida por Murcia, Almería, Albacete, Las Palmas y Valencia, todas con más del 80 % del territorio en mal estado. Si el análisis se centra en la proporción de zonas áridas que ya están desertificadas, el liderazgo sigue siendo para Alicante, con un 98,8 %, seguida de Cádiz, Málaga y Girona.

Las causas 

Entre las causas, el ADE advierte de que el regadío intensivo, lejos de frenar la desertificación o mejorar el estado del terreno, suele acelerar el deterioro. Muchas superficies agrícolas mantienen su verdor mediante fertilizantes y extracciones masivas de agua subterránea, lo que provoca la sobreexplotación de los acuíferos y la salinización del suelo. 

El sureste español -especialmente Murcia, Almería, Alicante y varias provincias de Castilla-La Mancha- aparece así como el epicentro de la desertificación en el país. Y dentro de este corredor de vulnerabilidad, Albacete destaca de forma especialmente preocupante, ya que combina una de las tasas más altas de aridez con un nivel de degradación superior al 80 % y es, además, la provincia con más kilómetros cuadrados desertificados de España. 

El Atlas recuerda que desertificación no es sinónimo de dunas o de desierto cinematográfico, sino la pérdida real de fertilidad, productividad y capacidad biológica del suelo.

María López

Nacida en Albacete (1996). Graduada en Periodismo por la Universidad de Castilla-La Mancha. He pasado por Cadena SER, Castilla-La Mancha Media y El Español.
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