En la provincia de Albacete, entre los paisajes de Albatana y Tobarra, se encuentra una joya histórica que pocos conocen, el acueducto de Albatana. A simple vista, puede pasar desapercibido, pero su estructura y antigüedad lo convierten en uno de los elementos hidráulicos más interesantes de la región.
Tradicionalmente, este acueducto ha sido considerado de época romana, construido entre los siglos III y IV d.C., aunque investigaciones recientes lo sitúan en el siglo XVIII. Durante esta época, el acueducto se utilizó como batán, es decir, como instalación para el lavado de lanas, y más tarde abasteció a un molino cercano.
Una longitud de 470 metros
El acueducto de Albatana tiene una longitud de 470 metros y se encuentra en el paraje conocido como Los Molinos, muy cerca de la localidad de Albatana. Su construcción se realizó en dos etapas. La primera, más antigua, es una obra maciza de mampostería y argamasa, mientras que la segunda está formada por sillares que conforman arcos carpaneles y pilares cuadrados, mostrando la evolución técnica de la época.
A diferencia del icónico acueducto de Segovia, el de Albatana es más discreto, con una altura reducida que se integra armoniosamente en el paisaje. Su canal de conducción, con una pendiente uniforme del 0,5 %, cuenta con una anchura exterior de 1,13 metros, lo que evidencia la precisión de su diseño.
Arquitectura y naturaleza
Más allá de su funcionalidad original, este acueducto es un ejemplo del ingenio hidráulico que ha marcado la historia de la provincia y una oportunidad única para quienes deseen descubrir la Albacete más histórica y sorprendente. Una visita a Los Molinos permite contemplar cómo la arquitectura y la naturaleza se fusionan en una obra que, aunque más modesta, guarda ecos de la grandeza de los acueductos más famosos de España.
Si estás buscando un plan diferente en Albacete, Albatana y su acueducto te ofrecen historia, arquitectura y naturaleza en un solo recorrido. Un recordatorio de que, a veces, los tesoros más impresionantes se esconden en los lugares menos esperados.

