Un vecino de Albacete se veía en la obligación de interponer una demanda en instancias judiciales debido a la situación que vive con el inquilino de su piso. Además, confirmaba que ha tenido que contratar una empresa de desokupas con el objetivo de mediar para que este inquilino abandone el céntrico piso en el que está instalado en Albacete capital.
“Tengo un piso en una céntrica calle de Albacete que alquilé a una persona”, explicaba el propietario del inmueble arrendado a El Digital de Albacete. Tras firmar un contrato de alquiler de la vivienda exponía que “al tercer mes empezamos a tener problemas”, asegurando que su inquilino “incluso se ha llegado a poner violento”.
Ante esta situación y las amenazas con no abandonar el inmueble, el propietario de este piso ha decidido interponer una demanda de conciliación que tiene por objeto la resolución del contrato de arrendamiento de esta vivienda y el desahucio de su inquilino “por reclamación de rentas debidas y suministros”, concreta la propia demanda. En concreto, el propietario del inmueble alega que el inquilino adeuda “el alquiler desde el mes de marzo y varias facturas de la luz”, puntualizando que la cuantía económica que debe al arrendatario de este piso en Albacete asciende a “5.850 euros más dos facturas”.
Como refleja la demanda interpuesta por este albaceteño, el propietario de esta vivienda realizó un contrato de arrendamiento el 1 de diciembre de 2024 de este inmueble en el que se estableció un alquiler de 650 euros mensuales que debían ser abonados anticipadamente entre los días 1 y 5 de cada mes en el número de cuenta habilitada a tal efecto. Igualmente, otra de las cláusulas del mencionado contrato de alquiler estipulaba que los servicios de electricidad, gas y agua corren por cuenta del arrendatario.

En este punto, subrayaba el afectado que el inquilino adeuda “9 meses de alquiler” así como “dos facturas de la luz de algo más de 95 euros”. Además, exponía el propietario de este piso en Albacete que “el 30 de noviembre de 2025 acababa el contrato”, pero asegura que el inquilino “me ha dicho que no se va, se ha puesto muy violento y me ha dicho que tampoco va a pagar las facturas”.
Además de poner en manos de la justicia esta situación, este albaceteño ha tomado la iniciativa de contratar los servicios de “una empresa de desokupas, quienes se están encargando de dialogar y mediar con él” con el objetivo de lograr abandone el piso de una forma pacífica. Más allá de esto, adelantaba que “también voy a interponer otra denuncia por falsedad documental”, asegurando que “para entrar en el piso necesitaba una nómina y era falsa, además de otros documentos que también ha falseado”.
Esperaba este vecino de Albacete que la situación pueda solucionarse lo antes posible, pero con la fecha de vencimiento del contrato de arrendamiento este 30 de noviembre advertía que su inquilino le ha “mandado un correo para decirme que no se va del piso por las presiones que está recibiendo por parte de la empresa de desahucios”. “No cumple nada, no paga”, concluía este vecino de Albacete sobre esta situación.


