Tal y como publicábamos este lunes en El Digital de Albacete, varios hosteleros de la capital llevan meses denunciando la presencia de una pareja que estaría recorriendo distintos restaurantes de la ciudad para comer con total normalidad y abandonar el local sin abonar la cuenta. Según relataban los responsables de los establecimientos, el comportamiento se repite siempre de forma similar. Realizan consumiciones de precio elevado, disfrutan de la comida sin prisas y, aprovechando un instante de descuido del personal, se marchan sin pagar.
Este martes, fuentes de la Policía Nacional han confirmado a este periódico que los agentes tienen plenamente identificados a los presuntos autores de todos los episodios denunciados. La identificación ha sido posible gracias a las grabaciones de las cámaras de seguridad de los distintos locales implicados y al efectivo trabajo de los agentes, que han permitido reconocer a la pareja y vincularla con los hechos investigados.
Tras ello, la Policía Nacional ha instruido las oportunas diligencias penales por presuntos delitos leves de hurto, trasladando el caso al Juzgado correspondiente. Al tratarse de delitos leves, la ley no contempla la detención de los presuntos responsables, pero eso no significa que las acciones queden impunes. En las próximas semanas, serán citados para comparecer ante un juez y responder por lo sucedido.
Un ‘modus operandi’ repetido
Entre los testimonios recabados por este medio, destaca el de una hostelera afectada que explicaba que la pareja aparenta una conducta completamente normal, aunque con un aspecto algo descuidado. «Atiendes a todo el mundo igual, no piensas que se vayan a ir sin pagar», relataba. Según detallaba, suelen pedir «lo mejor de la carta», como marisco, carnes de calidad, raciones especiales, postres y café. Consumos que elevan la cuenta fácilmente hasta los 60 o 70 euros.
El patrón es siempre idéntico. Durante la comida, uno de ellos sale a fumar mientras el otro permanece sentado. Luego intercambian los papeles, levantándose y entrando al local en varias ocasiones. Estas idas y venidas dificultan que el personal pueda controlarlos, y cuando surge el mínimo descuido, desaparecen.
Ahora, con las diligencias ya remitidas al Juzgado y a la espera de que los investigados comparezcan ante el juez, el caso continúa su curso legal. La resolución judicial determinará el desenlace de unos hechos que, durante meses, han afectado a numerosos establecimientos y han generado una notable inquietud en el sector hostelero de Albacete.
