Albacete se prepara para un cambio drástico del tiempo durante la semana del 17 al 23 de noviembre. Tras los últimos coletazos de la borrasca Claudia, que todavía dejará algunas precipitaciones débiles este lunes en Castilla-La Mancha, una potente masa de aire frío comenzará a descender desde latitudes altas. A partir del martes, el ambiente dará un vuelco definitivo, con un notable descenso térmico que se irá acentuando día a día.
Según Meteored, este episodio invernal se debe a un bloqueo anticiclónico en el Atlántico y a un conjunto de borrascas en Europa que abrirán un auténtico pasillo de aire polar hacia la Península Ibérica. Este patrón traerá consigo el primer gran zarpazo invernal de la temporada. El desplome de las temperaturas se producirá en tres fases, culminando el jueves y viernes, cuando llegará un pulso de aire muy frío que afectará con especial intensidad al centro y norte del país.
La AEMET confirma este escenario para Albacete. Este lunes aún se esperan intervalos nubosos, brumas y algún chubasco débil, pero a medida que el viento gire a norte, las temperaturas mínimas caerán de forma progresiva. El martes amanecerá ya con un ambiente más frío, cielos poco nubosos y posibles bancos de niebla en La Mancha, preludio de las heladas que se irán generalizando conforme avance la semana.
Temperaturas bajo cero
El episodio será especialmente intenso entre el jueves y el sábado. La cota de nieve descenderá hasta los 700–800 metros, lo que podría dejar ver el primer manto blanco en algunas zonas de montaña del sureste y del Sistema Ibérico cercano, aunque en la provincia la probabilidad de nieve será mayor en áreas elevadas y más reducida en la capital. Aun así, no se descarta que puedan verse algunos copos aislados si las precipitaciones coinciden con los momentos de mayor frío.
Las temperaturas previstas para la provincia reflejan la magnitud del cambio. En Albacete capital se esperan mínimas de 0 ºC y máximas de 9 ºC el jueves, y valores aún más bajos el viernes, cuando la mínima bajará hasta los –1 ºC y la máxima no superará los 7 ºC. En localidades como Almansa o Villarrobledo las mínimas caerán por debajo de cero varios días consecutivos, mientras que Hellín registrará un descenso más moderado pero igualmente significativo.
Primer golpe invernal
Este episodio también vendrá acompañado de heladas generalizadas en el interior y un marcado descenso de las máximas, que en muchas zonas difícilmente alcanzarán los 10 ºC. El viento del norte incrementará la sensación térmica de frío, por lo que el ambiente invernal será plenamente protagonista a partir de mitad de semana. Las precipitaciones, en cambio, serán escasas en la provincia, salvo en zonas del nordeste peninsular y Baleares, donde la influencia de los vientos del norte será mayor.
Los servicios meteorológicos advierten de que este primer golpe invernal puede sorprender a la población, especialmente después de los días más suaves que la borrasca Claudia dejó a su paso. Se recomienda extremar la precaución en las primeras horas del día ante posibles heladas, y preparar ropa de abrigo, ya que el invierno, aunque adelantado, llegará con contundencia a Albacete.

