No me refiero al efecto de marketing que produce una marca cuando va mas allá de las expectativas del cliente, ni a las siglas en inglés de Forma de Trabajo en los proyectos (Way of Working-WoW), directamente me enfoco en que no es casualidad que pocas cosas funcionen en este país, sino causalidad.
La letra con sangre entra y la repetición es una técnica para inducir el pensamiento crítico porque aprovecha la capacidad intelectual para consolidar información y explorar ideas en profundidad. Con todo, el mejor método en mi opinión, es el socrático que plantea preguntas abiertas para desafiar suposiciones y fomentar el razonamiento profundo.
El acoso escolar en España es un problema urgente y está estrechamente ligado al aumento de suicidios. Es una forma de violencia repetida y desequilibrada que afecta profundamente la salud mental de los niños y de los adolescentes que lo sufren. Rompe las familias al completo y lo hace gente asquerosamente fea por fuera y por dentro, como las sujetas que no han parado de acosar a Sandra Peña. Esta niña no volverá a la vida (ni otros como Jairo, Ángel, Marina o Kira) pero estas tipej@s, como todos los acosadores, por muy menores que sean, deben vivir un infierno en vida. El 80% de víctimas de bullying grave reportan síntomas TEPT (Trastorno de Estrés Postraumático) similares a los de una guerra, tan es así que la muerte se les presenta como la única salida.
Responsables son los tiparracos acosadores, (a veces acosados y maltratados) y sus padres porque han creado monstruos peores que Hidra, los profesores y todos aquellos que lo ven y lo callan. Vayan informando que el acoso escolar no es un conflicto infantil o juvenil, son actos que puede derivar en graves delitos (tratos degradantes, lesiones, inducción al suicidio) y la responsabilidad penal recae sobre todos los intervinientes, acosadores, centros educativos, testigos, profesores, padres que tutelan a menores y los protocolos que exige la fiscalía son muy estrictos. Deben cumplirse y en este último caso, no se han cumplido, como en tantos otros. Las penas pueden llegar a alcanzar los 10 años y hay que llegar hasta el final. Son escoria y como tales hay que tratarlos. Sin más. El buenismo no es para esto, no es para nada pero en todo caso para dejar perder un paquete de caramelos. En España se estima que se produce sobre un 9-10% del alumnado, miles de víctimas anuales de diversa consideración y hay que decir ¡BASTA! y sólo será basta cuando se impongan las penas y sean de obligado cumplimiento de forma íntegra y si se tiene que hacer la ley, que se haga porque se hacen otras muchas que sólo sirven para dañar a la sociedad. De los decretos, ni hablamos, desde Sánchez tenemos para dar y tomar.. así que andando, a legislar.

Y de los jóvenes paso a los jubilados, paso para hacer un llamada a la acción. Las personas mayores no son sólo nuestras queridísimas personas mayores, son los guardianes de nuestra memoria y de nuestra identidad; nuestro ADN cultural; nuestras raíces y un motor económico silencioso.
Representan cerca del 25%-30% del PIB regional (de unos 45.000 millones) y en Albacete ingresan 91,3 millones de euros. Puede decirse que inyectan alrededor de esa misma cantidad en comercios, farmacias, turismo de invierno….
Lo que ingresan de las pensiones es dinero circulante que impulsa la economía y crea riqueza, como anécdota les señalo que en 2024 el 20% de las patentes de Estados Unidos (EEUU) han sido registradas por mayores de 65 años (experiencia-innovación) y, según la revista Fortune 500, los líderes empresariales tienen un promedio de 58 años. Si vuelvo a escuchar a algún (lo digo) imbécil, decir que son una carga en lugar de infraestructura viva, le señalaré con el dedo (incluso siendo de mala educación eso de señalar).
Representan un poco más del 19% en Castilla-La Mancha y también en Albacete. Podrían controlar las elecciones, sus opiniones y denuncias tienen mayor peso que miles de likes.
Mi deseo es que ningún mayor tenga que salir a reclamar lo que per se es suyo. Centros cerrados, aceras, ascensores… Por derecho merecen las mejores atenciones, los mayores cuidados y el más absoluto respeto. Eso incluye no mentirlos o engañarlos.
Asegúrense de que sus hijos no destrozan la vida de ningún compañero y de que respetan a sus mayores, también que les ceden los asientos o les ayudan con el peso. Por favor, asegúrense.
Son la experiencia que no se compra, la estabilidad que evita locuras colectivas, las redes que ninguna Inteligencia Artificial (IA) puede replicar y el amor que une a las familias, son nuestro puente al futuro. Siempre luz y no reflejo.
Amelia F. Fernández-Pacheco

