Que el Albacete llevaba tiempo siendo un coladero en portería no hace falta que lo dijera nadie, ya que lo decían de manera apabullante los números. Ni Bernabé, ni Altube, ni Rivero fueron capaces de echar el cerrojo a la portería del Albacete en temporadas pasadas, un arco que tan sólo se vio medianamente seguro en el último tramo del curso 24/25, cuando se entonó algo Lizoain, un portero capaz de lo mejor y de lo peor y que tan pronto salvaba los muebles como los regalaba y pagaba hasta el lazo. Para tratar de dar más regularidad a la seguridad bajo palos, Toché ha traído este verano a Diego Mariño, un portero con experiencia del que todo el mundo espera que dé grandes tardes con el escudo del murciélago bajo el pecho; o por lo menos que haga que Lizoain suba el nivel si es que es el canario el que termina ganando la batalla en los entrenamientos y es por él por quien termina apostando Alberto González.
Así las cosas, Diego Mariño ha sido presentado como nuevo jugador del Albacete Balompié en la mañana de este miércoles y el gallego comenzó su presentación mostrándose agradecido e ilusionado por su llegada al Albacete Balompié. “Quería dar las gracias a Toché y también al club. Espero devolver todo este cariño con trabajo y buenas actuaciones para conseguir los objetivos. Va a ser un gran año y esperemos disfrutar mucho”, comenzó diciendo el ex del Granada.
La llegada del guardameta se fraguó tiempo atrás y lo que decantó la balanza para que llegara al equipo fue el buen hacer del club y su proyecto este año. “Estaba libre y desde que acabó la temporada se pusieron en contacto conmigo. Me transmitieron mucha confianza. Hablamos y la propuesta me hacía ilusión. Además, el Albacete está haciendo las cosas muy bien. Creo que puedo ayudar mucho. La categoría es muy difícil, pero se está haciendo una plantilla para que sea un año ilusionante”.
Mariño viene al Albacete abalado por su gran trayectoria con más de 300 partidos en LaLiga Hypermotion. “En toda mi carrera siempre he jugado y he podido disfrutar desde el campo. Eso habla bien de mí. He ido a muchos sitios con la vitola de suplente y al final me he hecho con el puesto. Gracias a eso tengo experiencia, son muchos partidos a mis espaldas y eso es algo que puedo aportar al equipo”.
Ilusión en torno al Albacete Balompié
Sobre qué podrá dar de sí la temporada para el Albacete, Mariño ha pedido «tranquilidad», pero ha reconocido que el vestuario «es consciente de la ilusión que se está generando. El año pasado fue un buen año para el club y en este se ha mantenido la base. Sin embargo, la categoría es muy difícil. Hay que tener los pies en el suelo e ir partido a partido» afirmó el nuevo portero del Albacete, valedor de su amplia experiencia en la categoría.
Paso a paso, con paciencia y trabajo, esas son las premisas de Diego Mariño para que este año sea una buena temporada. “No es una categoría para que en julio hablemos de objetivos. Hay que ser prudentes. Lo primero es llegar preparados al inicio de liga”.
Su compañero en la portería será Raúl Lizoain, con el cual tendrá “una competencia muy sana. Los dos vamos a querer jugar y el entrenador decidirá. Va a ver haber muy buen rollo que es como tiene que ser y el que se beneficiará de ello es el equipo. Cualquiera de los dos vamos a ayudar a que ganemos partidos” dijo
Mariño no es un desconocido para el Carlos Belmonte ni el Carlo Belmonte para él, ya que el gallego conoce bien el ‘teatro de los sueños’ albacetista. “He venido bastantes veces aquí. Es un campo que me gusta mucho porque se respira fútbol. La afición anima, se hace notar y eso puede ser bueno para toda la temporada. Nosotros somos los que tenemos que darles algo a los aficionados para hacerles creer, pero ellos van a ser muy importantes” concluyó.
