La historia de Rosa podría ser la de cualquier vecino de Albacete o la de cualquier otro usuario de RENFE, pues viajar en tren es cada día más odisea y a la mínima te ves envuelto en un problema. Ya sea quedarse tirado en mitad de la nada por una avería, por un imprevisto o porque la catenaria se viene abajo, o incluso que de un momento a otro te cambien la estación de la que sale tu tren para volver a casa.
Esto último fue lo que le pasó a la jienense Rosa, una usuaria de RENFE que iba a viajar en tren desde la Estación de Atocha, en Madrid, hasta Vilches, en Jaén. Sin embargo, apenas unas horas antes de que su tren partiera rumbo al citado pueblo de Jaén, RENFE le comunicó que no saldría de Atocha sino que lo haría desde Aranjuez. Y hasta allí que se fue Rosa en taxi, teniendo que pagar casi 94 euros por el trayecto en taxi. Una vez en casa, Rosa reclamó ese importe a RENFE, pero la empresa ferroviaria hizo oídos sordos y mandó la petición de Rosa a un saco roto para no devolverle ni un euro. Tras la reclamación de FACUA en nombre de Rosa, RENFE ha tenido que satisfacer los derechos de la usuaria y le ha devuelto hasta el último céntimo que esta mujer pagó al taxista que la llevó de Madrid a Aranjuez.
Así las cosas, y tal y como indica FACUA en nota de prensa, tras la intervención de la Asociación, «RENFE ha abonado a la usuaria los 93’50 euros que tuvo que pagar de taxi para llegar a la estación de Aranjuez, en Madrid, después de que la compañía le avisara el mismo día de que su tren a Jaén no podría salir desde Atocha, su lugar de salida habitual, por un descarrilamiento».
Añade FACUA que «Rosa Fernández compró en noviembre de 2023 tres billetes, para ella y sus dos hijos, para un trayecto desde Madrid hasta Vilches, en Jaén. La estación de salida de este tren, de Media Distancia, era Atocha Cercanías, situada en la capital madrileña. Sin embargo, el mismo día RENFE le mandó un SMS en el que le comunicaba que como consecuencia del descarrile de un tren el trayecto no podría realizarse desde la estación de Atocha, sino que debía hacerlo desde la de Aranjuez, situada a más de 50 kilómetros en este otro municipio. Me comunicaron el cambio apenas tres horas antes», comenta la afectada.
Rosa, según FACUA, «no tuvo más remedio que tomar un taxi que la llevara a ella y sus hijos hasta estación para poder coger el tren a tiempo. El trayecto duró aproximadamente una hora y tuvo que pagar por él 93,50 euros. La usuaria, socia y trabajadora de FACUA Jaén, era perfectamente conocedora de sus derechos y sabía que podía exigir a RENFE que le abonara el dinero del taxi, ya que el cambio de estación le había provocado ese perjuicio y la empresa debía hacerse responsable. Así pues, una vez en Vilches, se puso en contacto con RENFE para pedir que le pagara los 93,50 euros».
Explica FACUA que «RENFE, sin embargo, no respondió a los intentos de Rosa de recuperar su dinero, por lo que decidió plantear la reclamación a través de FACUA Jaén. Así, el equipo jurídico de la asociación se dirigió a RENFE instándole a abonarle los 93,50 euros. En este sentido, el artículo 13 del Reglamento (UE) 2021/782 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 29 de abril de 2021, sobre los derechos y las obligaciones de los viajeros de ferrocarril, recoge la responsabilidad de las empresas ferroviarias con respecto a los pasajeros sin perjuicio de la legislación nacional aplicable que conceda al viajero una indemnización suplementaria en concepto de daños, mientras que el artículo 1.101 del Código Civil señala que quedan sujetos a la indemnización de los daños y perjuicios causados los que en el cumplimiento de sus obligaciones incurrieren en dolo, negligencia o morosidad, y los que de cualquier modo contravinieren al tenor de aquellas».
Argumenta también FACUA que «RENFE también hizo caso omiso de las reclamaciones que presentó FACUA Jaén en nombre de Rosa, así que la asociación decidió elevar la cuestión ante la Junta Arbitral de Transporte de Jaén, para lograr un laudo favorable que obligara a la empresa ferroviaria a entregar el dinero del taxi. Sin embargo, no hizo falta que se pronunciase. En cuanto tuvo conocimiento de que el organismo había admitido a trámite la reclamación de la afectada, RENFE comunicó que procedía a hacerse cargo y abonaría los 93,50 euros. Dinero que Rosa ya ha recibido».