Ana Lozano, una joven de Albacete, ha compartido a través de sus redes sociales, su experiencia tras adquirir hace unos años un vestido de la marca de la conocida influencer sevillana Rocío Osorno, mismo atelier que lleva su nombre. Un vídeo que ha terminado por convertirse en viral y que ya suma cerca de un millón y medio de visualizaciones, al que Rocío Osorno ha contestado a través de una historia de Instagram.
Así, el vídeo de la albaceteña comenzaba con unas declaraciones de Rocío Osorno en el podcast ‘La Influencia’, en el que la diseñadora sevillana hablaba sobre las copias de sus vestidos, y manifestaba que estas prendas “muchas veces no tienen la calidad ni de boda”. Unas declaraciones que le hacían recordar a Ana, la chica de Albacete, su experiencia comprando en la tienda de Rocío Osorno hace unos años.
De este modo, la joven explicaba que “cuando me gradué estaba enamorada de un vestido de Rocío Osorno llamado Silvia”, y recordaba que finalmente, se compró el vestido que tenía un valor de “300 euros”. La pesadilla de esta albaceteña empezó cuando la prenda llegó a casa. “Mi madre me mandó una foto y no quería entrar en pánico, pensé que mi madre no tenía buena cámara y le di una oportunidad”.
Una joven de Albacete se hace viral por lo que le pasó con un vestido de Rocío Osorno y la influencer contesta
Cuando Ana llegó a casa se probó por fin aquel vestido del que se había enamorado. “Parecía hecho de tul del tutú del chino de abajo de mi casa, con un pegote de purpurina”, explicaba la joven, que aseguraba que cuando fue consciente de que se había gastado “300 euros por un vestido con una tela de tutú de chino empecé a llorar, parecía una niña de 5 años disfrazada de carnaval”.
“Me parece una vergüenza que una web de alta costura que vende los vestidos a precio de oro y que luego la tela picaba en el cuerpo, era muy áspera y se enganchaba todo”, recuerda la joven. De este modo, también aconsejaba “leer bien la política de devolución porque no se pueden devolver los vestidos”. Así, aunque Ana señalaba que “fue el trauma de mi vida, encontré una modista que me salvó y me hizo un vestido precioso. Fui guapísima a mi graduación”, señalaba.
Rocío Osorno ha contestado a esta joven de Albacete a través de Instagram; otras chicas aseguran que les ha ocurrido lo mismo
Unas declaraciones que parece que no han gustado a Rocío Osorno, que ha contestado a la chica de Albacete a través de sus historias de Instagram. “Me han enviado un vídeo de una chica haciendo una valoración de un vestido mío de la colección de hace años y me parece cuanto menos oportunista, además de injusto tirar por tierra todo el esfuerzo de una empresa”, señalaba la influencer, que manifestaba que se trataba de un vestido “top venta de mi colección en todas sus versiones. La moda cambia muchísimo. Y las tendencias de hace unos años distan mucho de lo que nos gusta hoy”.
En esta línea, Osorno destacaba que el tejido “lo compré a un proveedor de Israel muy conocido en el sector porque tiene tejidos de fiesta y pedrería de una calidad impresionante, nos costaba 37 euros el metro + IVA”. “Seguro que recordáis vídeo super virales de la época y son todos con tejido de tul y purpurina que hasta entonces no se había visto”, manifestaba la influencer, y sostenía que “los vestidos tenían un brillo impresionante, yo misma me puse todos para eventos, justamente el que ella critica me lo puse para una boda”. “Vuelvo a decir: me parece injusto y oportunista”, zanjaba Rocío Osorno.
Por otra parte, las redes ardían tras el vídeo que se ha convertido en viral de la joven albaceteña, repleto de comentarios de otras chicas que aseguraban que les había ocurrido lo mismo con la misma marca. “Gracias a Rocío Osorno me quedé sin vestido a una hora de mi graduación porque se descosía a trozos. Respuesta: Ninguna. 400 euros de vestido”, aseguraba una chica en los comentarios del vídeo viral, mientras que otra indicaba que “me engañaron durante meses diciéndome que podrían hacerme el vestido que quisiera a medida. A un mes y medio de la boda de mi hermana me dejaron tirada”. Del mismo modo, otra usuaria manifestaba que su vestido “llegó roto, las hombreras descosidas, lo arreglé porque no podía devolverlo. Me lo puse y a los cinco minutos se me descosió entero”.
