Las polillas se han convertido en las protagonistas estos últimos días, ya que algunos vecinos de Albacete han compartido en redes sociales su preocupación por la proliferación de las mismas en la ciudad. Como les informábamos en la tarde de este martes, 27 de mayo, desde El Digital de Albacete, eran muchos los vecinos que transmitían su malestar ante esta situación a través de redes sociales. Una situación que todavía afecta a diversas zonas de la ciudad.
Desde que una usuaria manifestó que estos insectos habrían llegado a la zona de El Paseo de la Cuba, fueron muchos los vecinos de Albacete que confirmaron que la proliferación también estaba afectando a otras zonas tales como la Vereda de Jaén y la Carretera de Jaén, la zona de la Estación, y los barrios de El Pilar, San Pablo e Imaginalia.

Tras ello, varios vecinos de Albacete confirmaban que la polillas se habrían extendido y la situación estaría afectando a otras zonas de la ciudad. “En el barrio de La Estación hay muchísimas, cada vez que recojo la ropa salen 6 ó 7”, explicaba una albaceteña a través de redes sociales, mientras que otra aseguraba que “la zona del barrio San Antón está infestada de polillas y son enormes”.
Estos pequeños insectos han aterrizado en Albacete para sorpresa de sus vecinos
Desde el barrio Fátima, aseguraban tener la casa “llena” de polillas, y explicaban que “no hay forma de terminar con ellas”. Una de las zonas afectadas también es la del Parque Lineal, concretamente “en la zona de la Comisaría Nacional”, cuyos vecinos aseguran que “también hay muchas”.
Además, vecinos de Albacete aseguraban que tienen “trampas para polillas en los armarios y están a tope”, y sostenían que “en mi vida he visto tantas”. Lo cierto es que la situación ha causado sorpresa y curiosidad entre los vecinos de Albacete, por lo que estos pequeños insectos también se han convertido en protagonistas en la jornada de hoy.

Al respecto, cabe destacar que el año pasado, por estas fechas, Madrid vivió una situación muy similar, una proliferación que se produce «cada cierto tiempo» por el calor y las lluvias, pero estos animales «no vienen a causar mucho daño», no transmiten enfermedades y lo mejor para que no entren en casa es no tener a la vez la ventana abierta y la luz dada, según afirmaba el científico titular del Museo Nacional de Ciencias Naturales (CSIC) Óscar Soriano.