El Albacete consiguió este domingo la permanencia matemática en Segunda división al vencer 3-2 al Huesca y mantener su renta de once puntos respecto a la zona de descenso, cuando solamente restan tres jornadas para la conclusión de la temporada regular.
Los futbolistas que dirige Alberto González lograron un triunfo épico tras encajar el 1-2 en el minuto 95 y ser capaces de remontar el resultado en contra con dos tantos de Kofane en el tiempo añadido, concretamente en los minutos 98 y 100.
La victoria blanca le ha aupado al décimo puesto de la clasificación y todavía mantiene opciones de clasificarse para disputar las eliminatorias de ascenso, ya que está a ocho puntos del sexto puesto cuando faltan nueve puntos por disputarse.

Lograrlo es, prácticamente, una utopía, aunque el entrenador albacetense ya ha dejado claro que tratarán de ganar los tres partidos para seguir dando alegrías a una afición que este domingo vibró con la gloriosa victoria contra el cuadro oscense.
Fundamental en el último triunfo y en la segunda vuelta del Albacete ha sido el delantero camerunés Cristian Kofane, autor de 8 goles en 17 partidos, a los que ha sumado una asistencia y una “inteligencia” en el juego que ha sido destacada por su técnico y sus compañeros.
También decisiva ha sido la aportación del extremo Pablo Sáenz, cedido por el Granada en el mercado invernal, que ha marcado cinco goles en catorce partidos y ha dado una asistencia que han ayudado a que el conjunto manchego garantice su continuidad en la división de plata del balompié nacional.