Los albaceteños y sus mascotas desafiaban al frío y no faltaban a la tradicional bendición de San Antón. Acompañados por sus perros, gatos, aves y otros muchos animales los vecinos de Albacete se acercaban hasta la Residencia Asilo de San Antón para participar en esta entrañable cita.

Las puertas de esta especial residencia de mayores de Albacete se abrían de par en par un año más para celebrar el día de San Antón. Residentes, trabajadores y las Hermanitas de los Ancianos Desamparados que gestionan este centro recibían con los brazos abiertos a todos los albaceteños que llegaban con sus mascotas hasta este punto de la ciudad dispuestos a recibir la bendición del santo.

De forma previa a la bendición de los animales, tenía lugar en el Asilo de San Antón una celebración religiosa y, posteriormente, la imagen del considerado como el “santo de los animales” recorría las calles aledañas a esta residencia de mayores arropado por numerosos fieles y sus mascotas. El alcalde de Albacete, Manuel Serrano, no faltaba a esta tradicional bendición acompañado por otros miembros del Equipo de Gobierno y de la Corporación Municipal.

Manuel Serrano ha destacado la importancia que tiene la festividad de San Antón para nuestra ciudad, como una de las fiestas más tradiciones con las que cuenta, apostando por garantizar su conservación entre todos. Además, el alcalde ha agradecido a las Hermanitas de los Ancianos Desamparados «la labor ejemplar que, de manera desinteresada y con tanto mimo, realizan a diario a favor de las personas mayores que residen en el Asilo de San Antón», al tiempo que ha puesto en valor «su importante contribución social a nuestra ciudad».

UN DÍA EN EL QUE LAS MASCOTAS DE LOS VECINOS DE ALBACETE SON LAS VERDADERAS PROTAGONISTAS
Hasta las puertas del Asilo de San Antón se acercaban numerosos vecinos acompañados de sus inseparables mascotas. Para muchos era la primera vez que asistían a esta cita para recibir la tradicional bendición de San Antón. Este era el caso de Marta y Rocío quienes se animaban a sumarse a esta cita con su perro Neo quien “tiene un año y medio y es la primera vez que viene”, indicaban.

Explicaban que el motivo de animarse a venir era “conocer un poco el ambiente y los animales que vienen”. Del mismo modo reconocían que Neo “es uno más de la familia, es como un hijo y el juguete de la casa”, aseguraban estas albaceteñas.

Definían a su perro como un animal “muy tranquilo para lo joven que es”, añadiendo que “sociabiliza muy bien con perros grandes y pequeños”. Al respecto, subrayaban que “es un gusto ir con él”, animando a los albaceteños a venir a que sus mascotas reciban la bendición de San Antón “y a cualquier evento que haya con animales”.

También era la primera vez que Javier y Coco participaban en esta entrañable jornada. “Coco es un perro que tiene dos años y medio”, compartía con El Digital de Albacete su dueño sobre este animado animal, asegurando que “es uno más de la familia y hemos venido a celebrar su día”. Al respecto, desvelaba que “es la primera vez que venimos”, buscando vivir juntos “una experiencia nueva y disfrutarla unidos”.

UNA TRADICIÓN A LA QUE NO FALTAN LOS VECINOS DE ALBACETE
Pero también había quien ha convertido este día de San Antón en una tradición a la que no faltar ningún año. Así Nara recibía la bendición del santo acompañada de su dueña Joaquina. Sobre este chihuahua reconocía la albaceteña que “es la flor y nata de nuestra casa”.

Con Nara entre sus brazos trasladaba que “no es la primera vez que venimos a San Antón”, asegurando que el motivo de no faltar a esta cita “es la fe”. Al respecto, manifestaba que “todos tenemos que estar protegidos”, hasta nuestras mascotas porque “son también parte de nuestra familia”.

Para Preico y Jerónimo este día de San Antón también es toda una tradición. “Venimos todos los años”, confesaba este albaceteño de 80 años que acaparaba todas las miradas por la particular forma de llevar en un bastón a Perico. De este modo consideraba que “es una tradición muy bonita y con muy buen ambiente a la que no podemos faltar”.

José decidía sumarse a esta entrañable cita con su canario Paquito. Sobre esta mascota explicaba el albaceteño que ha llegado a su vida “hace muy poco porque falleció otro que tenía hace unos días”. Así decidían bautizar a su pájaro con el nombre de Paquito, quien recibía este 17 de enero por primera vez la bendición de San Antón.

Un año más los albaceteños y sus mascotas han cumplido con esta entrañable tradición y no han querido faltar a la bendición de San Antón, acompañando a residentes, trabajadores y hermanitas el calor y la cercanía de los animales.

































































/Fotos: Miguel Ángel Romero/