La agrupación naturalista toledana Esparvel ha presentado un escrito a la Consejería de Desarrollo Sostenible de Castilla-La Mancha en el que defiende la obligación de usar munición sin plomo en las actividades cinegéticas frente a la decisión de la Consejería de prorrogar esta aplicación hasta el 31 de marzo de 2028.
En una nota de prensa, Esparvel ha argumentado que existen otras alternativas viables a la munición de plomo que no contienen «toxicidad», como las de acero, cobre o bismuto, que «son seguras y eficaces».
Ha explicado que el reglamento de aplicación de la Ley 3/2015 de Castilla-La Mancha (Ley de Caza) entró en vigor en 2022 y estableció un período de transición de tres años para la prohibición de la munición de plomo, un plazo «más que suficiente» para que el mercado haya desarrollado y comercializado munición sin plomo, ha indicado el colectivo.
Para esta asociación, prorrogar la obligación de uso de munición sin plomo hasta 2028 supone perpetuar un riesgo «inaceptable» para la salud pública y la biodiversidad.
Esparvel ha defendido que la protección del medio ambiente, la conservación de la biodiversidad y la salud humana que deben prevalecer sobre los intereses económicos y operativos de determinados sectores cinegéticos
