La consejera portavoz del Gobierno regional, Esther Padilla, ha recordado que sólo una persona, el presidente Emiliano García-Page, «ha dado el paso» para liderar el proyecto del PSOE en Castilla-La Mancha y ha opinado que «la única información novedosa» en el Congreso Regional previsto para los días 18 y 19 de enero será la composición de la Ejecutiva.
De este modo ha respondido Padilla este miércoles a preguntas de los periodistas en rueda de prensa sobre la renovación de los liderazgos territoriales en el PSOE y cómo ve el panorama en Castilla-La Mancha.
La portavoz del Ejecutivo autonómico ha incidido en que «la mejor manera» de elegir a los líderes en los partidos políticos es que lo haga la militancia y ha manifestado «respeto absoluto» por lo que decida la militancia en cada una de sus federaciones.
En este sentido, ha recordado que en esta región ya se ha decidido. «Sólo ha habido una persona que ha dado el paso porque así se le pidió en el último Comité Regional de manera unánime, que es el presidente y actual secretario general, Emiliano García-Page, para liderar nuevamente el proyecto del PSOE para Castilla-La Mancha», ha recalcado.
Por ello, ha considerado que la única información que puede haber «novedosa» es «cómo terminará la Ejecutiva» porque «nuestro secretario general será Emiliano García-Page, que es el que hemos querido en Castilla-La Mancha».
«Resultados que no se corresponden con la realidad»
Preguntada también por la encuesta publicada en La Razón, que otorga a la suma de PP y Vox mayoría absoluta en Castilla-La Mancha, Padilla ha aseverado que, desde 2015, «las encuestas que el PP encarga» siempre «dan a la baja» los resultados al PSOE y que éstos «no se corresponden con la realidad», ya que «ellos ganan las encuestas y el presidente Page gana en las urnas».
También sobre el retroceso de la izquierda a nivel nacional y el avance de la derecha y la ultraderecha, la consejera portavoz ha afirmado que «la polarización no ayuda a la normalización de la política en España» y «hace que crezca la extrema derecha».
A su juicio, «todos deberíamos contribuir a hacer política de manera más sosegada», de forma que «se escuche más» para «fomentar acuerdos», lo que «ayudaría a que los extremos no crecieran».
En este punto, ha reconocido que en Castilla-La Mancha «se practica mucho la sensatez y normalidad», así como «escuchar y hablar con todo el mundo», lo cual «tiene su reflejo en los resultados electorales y en el día a día».
Asimismo, se ha referido al enfrentamiento entre los ministerios de Economía y de Trabajo por la reducción de la jornada y ha dicho que es «difícil de entender», al tiempo que ha insistido en la importancia de conseguir avances, pero «de manera dialogada y acordada».
