De viaje al corazón de la infancia en Albacete

El albaceteño Luis Miguel Martínez-Gómez y su colección particular de juguetes

La Casa Perona de Albacete ha abierto las puertas de su sala de exposiciones a la nostalgia y el recuerdo con la muestra ‘Sin wifi. Juguetes de nuestra infancia’. Una muestra de juguetes de otras épocas, que reúne extraordinarias piezas procedentes de la Colección Museográfica de la Infancia de Albacete (Museo del Niño), y de la colección particular del albaceteño  Luis Miguel Martínez-Gómez.

Luis Miguel Martínez-Gómez

El coleccionista, que tiene en la actualidad 67 años, confiesa que “el jugar no tiene edad. Siempre me ha gustado jugar, de hecho lo sigo haciendo, y disfruto mucho con los juguetes. En casa teníamos una fábrica y comercio de cuchillería, y al mismo tiempo una paquetería en la que también se vendían juguetes. Estos nos dieron, a mis primos y a mí, la posibilidad de disfrutar de los juguetes en cuanto llegaban a la tienda, sobre todo en fechas señaladas como Navidad y Reyes. Recuerdo que, cuando terminaba la campaña, la abuela Consuelo nos regalaba aquellos juguetes que no se habían vendido.

Algunos de los juguetes de Luis Miguel Martínez-Gómez

Además, mis primos se cansaban enseguida de los suyos, así que me los daban a mí, que era el que más los aprovechaba. De este modo empecé a tener mi primera colección de juguetes”.  

Algunos de los juguetes de Luis Miguel Martínez-Gómez

Afición por el coleccionismo de juguetes antiguos

Ese niño, hijo de cuchilleros, fue creciendo, pero los juguetes seguían siendo una parte importante de su vida. “Mi familia sabía de mi afición, así que cuando ya era más mayor, y a alguien le daba por vaciar su trastero, me llamaba para que me quedase con los juguetes de sus hijos. Poco a poco me fui haciendo con los juguetes procedentes del entorno familiar, y eso me llevó a buscar piezas que, aunque había tenido en la infancia, ya no conservaba. Fue así, a modo de reto, como comenzó mi afición por el coleccionismo de juguetes antiguos”, recuerda.

Algunos de los juguetes de Luis Miguel Martínez-Gómez

Básicamente, la colección se compone de juguetes de los años 50 y 60, décadas en las que vivió su infancia. “Tengo juguetes que tienen un valor incalculable, e incluso algunos sin estrenar. Y es que, una de mis tías nos solía regalar los mismos juguetes  a mi primo y a mí. Yo jugaba con ellos hasta destrozarlos, pero  a mi primo no le gustaban tanto, así que  acababa guardándose sin usar. Con los años, estos juguetes  han ido apareciendo y me los he ido quedando para la colección, por lo que a día de hoy conservo la pieza destrozada, y la versión sin estrenar”, explica.

Algunos de los juguetes de Luis Miguel Martínez-Gómez

La colección de juguetes antiguos de Luis Miguel es un auténtico viaje al corazón de la infancia, que guarda joyas como “juegos de Parchís de los años 60, un Juego de la Oca francés de los años 30, juegos relacionados con concursos de televisión, como el del ‘1,2,3’ de la primera época, o el ‘Volorama’, un juego que se hizo muy popular en 1972 al convertirse en el premio de consolación de los perdedores del concurso televisivo ‘Juego de letras’, presentado por Joaquín Soler Serrano. También el clásico ‘Juegos reunidos’ que lanzó  la casa ‘Jeyper’ a finales de los años 60, o los ‘Juegos Reunidos’ alemanes, que curiosamente compartían los mismos tableros que los españoles. Además hay futbolines de distintas clases, desde los clásicos de madera, hasta los de plástico que utilizan ventosas o muelles y se accionaba con el dedo”, apunta.

Algunos de los juguetes de Luis Miguel Martínez-Gómez

Mi juguete favorito

Entre todos los juguetes hay algunos muy especiales para el coleccionista albaceteño. “El juego ‘Magia Borrás’ de finales de los año 50, primeros 60, es uno de mis favoritos, porque no solo es bonito por el contenido, sino también por el continente, y es que todos los accesorios para los trucos de magia van guardados en una maleta preciosa que tengo muy bien conservada. Pero uno de los más entrañables para mí siempre ha sido ‘4 pescan’, un juego muy divertido, lanzado por ‘Congost’ en 1977, que  me dio muchas alegrías durante la infancia, porque jugaba mucho con él. En este juego te conviertes en pescador y tenías que conseguir pescar con tu caña el mayor número de peces que pudieras. Estos peces llevaban un imán e iban numerados, y esos números eran los puntos que obtenía el jugador.

Algunos de los juguetes de Luis Miguel Martínez-Gómez

Otro juego que me gustaba mucho era ‘Área 12’, también de ‘Congost’, en el que podías conducir un pequeño coche dirigido mediante un imán”, explica.

Algunos de los juguetes de Luis Miguel Martínez-Gómez

Juegos educativos

Siempre ha existido en el mercado una clase de juguetes que se conocen como ‘Juegos educativos’, que facilitan el aprendizaje y dotan a quienes juegan con ellos de herramientas básicas para su desarrollo. “También cuento en la colección con juegos educativos,  entre ellos tengo unos muy curiosos, como el juego de la ‘Anatomía Humana’, que sacó al mercado industrias ‘Serima’, y que tuvo un gran éxito durante la década de los 60. Son tres cajas, una en la que se pueden encontrar los huesos que formaban el esqueleto, otra en la que se hallaban los órganos internos, y una tercera en la que aparecía el maniquí con los músculos sobre una figura en relieve”, resalta.

Algunos de los juguetes de Luis Miguel Martínez-Gómez

Juegos de construcción y sobres sorpresa

Empresas de juguetes como ‘Goula’ causaban sensación en aquella época con sus creaciones para los más pequeños. “Me encantaban todos los juegos relacionados con la casa ‘Goula’. Fabricaban miniaturas, en los años 50 de madera, y ya en los 60 de plástico. Hacían granjas, castillos, trenes, coches, fuertes, y hasta construcciones urbanas. A los fuertes del ‘Oeste Americano’ de ‘Comansi’ también les tengo mucho cariño. Además, era muy económico, porque por una peseta comprabas  un indio o un vaquero en el kiosko. Las casas ‘Monta- Plex’ y ‘Serjan’ sacaron a la venta los ‘Sobres sorpresa’, en los que no sabías lo que había dentro. Los tengo de muchas temáticas, de batallas, de fútbol, o de circuitos de velocidad. A mí me gusta coleccionarlos cerrados, porque me puede más la fuerza de conservarlo, que la curiosidad de saber lo que hay dentro. Por otro lado, los juegos de arquitectura de ‘Exin’ causaron furor en la época, y en 1968 sacaron al mercado el ‘Exin Castillos’, que se convirtió en uno de los juegos de construcción más emblemáticos y que más han perdurado en el tiempo. Este castillo es muy especial para mí, porque llegó a mí cuando salió a la venta en 1968, y fue el primer castillo que me regaló mi abuela Consuelo”, subraya.

Algunos de los juguetes de Luis Miguel Martínez-Gómez

El Castillo de ‘Exin’  está expuesto en ‘Sin wifi’. Juguetes de nuestra infancia’, una exposición que “pretende demostrar que se puede jugar al margen de las pantallas, y que antiguamente se disfrutaba mucho más. Incluso hay una vitrina muy bonita sobre juguetes  populares donde tenemos un zompo, una comba, y unos bolos, que reflejan que se podía jugar en la calle perfectamente, sin necesidad de tanta pantalla”, concluye. La exposición ‘Sin wifi. Juguetes de nuestra infancia’ se puede visitar en la Casa Perona de Albacete, hasta el 24 de enero. 

/Fotos y texto: Modesto Colorado/

Modesto Colorado

Comunicador y cantante de Albacete. Más de 20 años de experiencia en medios de comunicación, especializado en información y reportajes de ámbito cultural.
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