El Grupo Municipal de VOX en Albacete, formado solamente por la concejal Lorena González, también diputada en la Diputación Provincial, ha remitido una nota a los medios de comunicación en el que pide la realización por parte del Ayuntamiento de una campaña de divulgación e información para concienciar a las familias de la importancia de que los niños, y también adolescentes hagan un uso responsable de los dispositivos electrónicos.
Resulta curioso que VOX pida una campaña de comunicación cuando esta misma formación y esta misma concejala/diputada siempre señala a la Publicidad Institucional como un gasto superfluo a eliminar. La última ocasión en la enmienda a la totalidad a los presupuestos de la Diputación de Albacete.
Ante esto solo cabe preguntarse ¿Cómo pretende VOX que el Ayuntamiento haga una campaña efectiva en la que llegue al ciudadano si no es a través de la contratación de publicidad?. ¿Querrá obligar a los medios a publicar sus anuncios gratis?
Este es un nuevo ejemplo de la bisoñez de VOX ALBACETE, una formación que se llena de contradicciones al pasar del slogan impuesto desde Madrid a la realidad del día a día, que ha dinamitado un grupo clave en el Ayuntamiento de Albacete, donde contaban con 4 concejales, para que por quitas personales y purgas internas dejarlo en un solo concejal y en la más estricta irrelevancia política.
Habrá que esperar a ver si la señora Lorena González explica cómo piensa llegar a los padres de Albacete sin partida de Publicidad Institucional, es decir, de la que se pagan los anuncios en medios y soportes fijos de la ciudad para campañas de sensibilización, concienciación y anuncios que los diferentes organismos deben hacer llegar a los ciudadanos.
Todavía la ciudadanía está esperando las explicaciones a porque la señora González prefirió asistir al un evento de su partido en Madrid el mismo día en el que se votaban las ayudas extraordinarias de la Diputación de Albacete a Letur tras la riada. Su asiento ausente fue la imagen más comentada de la jornada sobre un cargo público que cobra por deberse a sus ciudadanos antes que a su partido.
