Con un gesto tan sencillo como sacar su teléfono móvil y llamar a la policía, un vecino de Albacete evitó que a día de hoy pudiéramos estar hablando de consecuencias muy graves tras los hechos protagonizados por un varón de 48 años al que la policía local pudo localizar y detener.
El arresto de esta persona tuvo lugar en la calle Hellín, uno de los tramos de la Circunvalación, pero comenzó unos minutos antes, cuando en notable estado de embriaguez se dirigía hacia su coche y, sin pensarlo lo más mínimo, se subía en él, se ponía a los mandos, lo arrancaba y se incorporaba a la circulación en un estado que ponía en serio peligro la vida de todos aquellos que se cruzaron con él, e incluso la suya propia.
Un ciudadano de a pie lo vio todo y no dudó en llamar a la Policía Local de Albacete para informar a los agentes lo que estaba ocurriendo, dando además una precisa descripción de esta persona y del vehículo en el que se desplazaba.
Activada la Policía Local de Albacete
Ante tales hechos, la Policía Local de Albacete estableció un dispositivo de búsqueda que dio sus frutos minutos después con la localización del turismo sospechoso, interceptándolo de inmediato y sometiendo a su conductor a las pertinentes pruebas de alcoholemia.
Con los resultados en la mano, la Policía Local de Albacete procedió a la detención de este sujeto, pues arrojó una tasa considerada como penal al sobrepasar notablemente los 0’60 miligramos de alcohol por litro de aire espirado.
Así pues y tras el arresto de esta persona, la Policía Local de Albacete instruyó las pertinentes diligencias penales por un presunto delito contra la seguridad vial, poniendo al detenido a disposición judicial para que sea el juez el que dictamine su futuro más inmediato al respecto tras los presuntos hechos cometidos.