‘La estafa del amor’ está a la orden del día en toda España, y Albacete no es ajena a esta nueva oleada de cibercriminalidad que afecta a muchas personas en la provincia. Para combatir este nuevo delito, la Asociación Nacional Contra la Estafa con Manipulación Emocional (ANCEME) ha puesto sobre la mesa varias reivindicaciones para luchar porque se recojan este tipo de nuevos delitos en el código penal.
Una ciberestafa que consiste en la manipulación emocional hacia las víctimas, generalmente mujeres, para conseguir transferencias de dinero desde perfiles falsos a través de redes sociales. Hace unos años, estos perfiles eran propios de las aplicaciones de citas, pero se han extendido a todas las redes sociales, desde Instagram hasta redes profesionales como Linkedin.
Esta asociación cuenta ya con más de una centena de personas afectadas por este tipo de estafa, la mayoría de ellas mujeres, aunque también son muchos los hombres que han sido estafados. Concretamente, componen un 25% de la asociación, según datos de la Asociación Nacional Contra la Estafa con Manipulación Emocional. Además, su presidenta, Blanca Frías, explica a El Digital de Albacete que estas personas están repartidas por todo el territorio español, incluyendo casos en Castilla-La Mancha.
Según fuentes consultadas por El Digital de Albacete, más de una veintena de casos se habrían detectado durante 2023 en la capital albaceteña, y habrían sido denunciados con consecuencias económicas muy graves para las víctimas. Una cifra importante si tenemos en cuenta que solo se trata de la punta del iceberg, ya que gran parte de estos casos acaban silenciados, debido al profundo sentimiento de culpabilidad que sufren estas mujeres.
Si tenemos en cuenta solamente a los miembros de esta asociación, suman unas pérdidas económicas que saltan de los cuatro millones y medio de euros perdidos, lo que supone una media entre 70.000 y 75.000 euros de pérdidas por persona.
El ‘modus operandi’ de los estafadores
Los estafadores cuentan con un ‘modus operandi’ muy concreto y repetido. “Normalmente intentan dirigirse a un público muy específico”, apunta Blanca Frías, presidenta de ANCEME, que manifiesta que “buscan personas que tengan ciertas situaciones emocionales vulnerables, generalmente personas a partir de los 50 años con divorcios, separaciones o que sufren soledad no deseada”. La razón de elegir este tipo de perfiles, es buscar personas con años de vida laboral y ahorros, por este motivo “la edad es a partir de los 50 años, sin límite por arriba. De hecho, el 33% de las personas estafadas son de la tercera edad”, tal y como ha explicado la presidenta de la asociación, Blanca Frías, a El Digital de Albacete.
Hace unos años, este tipo de estafas se llevaban a cabo a través de aplicaciones concretas. Hoy en día, están a la orden del día y abarcan todo tipo de redes sociales. “Se valen de cualquier red social. Las más comunes Facebook e Instagram”, manifiesta Blanca Frías, que explica que la estafa ha llegado hasta Linkedin, “aunque ya ni ‘TikTok’ se salva”, tal y como asegura Frías.
Unas solicitudes de amistad, que llegan prácticamente de la nada “con un mensaje casi de casualidad, en el que te intentan embaucar”, asegura la presidenta de la asociación. Una de las grandes señales de alerta en este tipo de perfiles es la profesión de los estafadores. “Tienen una profesión aparentemente espectacular. Son militares, médicos o hasta actores, y mucha gente no se resiste a esa curiosidad”, explica Blanca Frías.
“En esta primera fase de embaucación, ellos se encargan de decirte todo lo que tu quieras oír, y se aprovechan de las situaciones vulnerables”, manifiesta Frías, que añade que los estafadores “enseguida se dan cuenta del talón de Aquiles de cada persona”. Por su parte, las víctimas, que se encuentran en situaciones delicadas o tienen cierta vulnerabilidad, “es normal que se agarren a lo que les alivia ese dolor o esa carencia”, manifiesta la presidenta de la asociación que lucha contra estas estafas emocionales.
Las pérdidas económicas, entre 20.000 y 900.000 euros
En cuanto a las cifras económicas, hay personas asociadas que han perdido entre 20.000 y 900.000 euros a causa de esta estafa basada en la manipulación emocional. De hecho, muchas personas llegan a quedarse completamente desamparadas, endeudadas y sin recursos debido a este tipo de estafas, según explica Blanca Frías a El Digital de Albacete.
Los números son muy altos, pero el coste emocional también lo es. “Lo que sienten es tal vergüenza y tal culpa que lo callan”, matiza la presidenta, haciendo referencia a las víctimas, y ratifica que “el 90% de personas lo calla, y los que no, son los que se mueven para poner la denuncia”. Por este motivo, las denuncias presentadas son tan solo la punta del iceberg de “una estafa latente pero dormida”, tal y como retrata Blanca Frías la situación.
Además de las grandes pérdidas económicas y del dinero que sacan estos estafadores manipulando psicológicamente a las víctimas, en algunos casos, existe otro tipo de chantaje. “Hay todo un entramado de blanqueo de capitales utilizando cuentas ‘mulas’ y cuentas falsas”, explica la presidenta de la asociación, que matiza que “a veces las víctimas reciben llamadas del propio estafador y le ofrecen devolverle parte del dinero a cambio de utilizar su cuenta para ingresar todo el dinero que sigan estafando”.
Muchas denuncias quedan archivadas y no prosperan
Poner la denuncia no es una tarea fácil, debido al shock emocional que puede suponer coger consciencia de que esas personas, hacia las que existía un sentimiento de amor, en realidad no existen, y además son estafadores. “Hay que tener las cosas claras para ir a poner la denuncia y muchas veces las personas están en shock y es difícil darse cuenta y relatarlo”, explica Frías, que manifiesta que «la denuncia hay que llevarla preparada y redactada a la Policía”.
Una de las reivindicaciones de la asociación es que estas mismas denuncias muchas veces llegan al juzgado para ser archivadas, con la impunidad que esto otorga a los estafadores. “Que te recojan la denuncia no significa que exista una investigación, y sin investigación, se archiva”, asegura la presidenta de ANCEME, que aclara que para llegar a la autoría de estos fraudes “se requiere de tiempo y recursos”.
“Detrás hay todo un entramado de bloqueo de capitales”
Blanca Frías hace especial hincapié en que “no son casos aislados, es todo un colectivo”, y explica que detrás de estos fraudes “hay una mafia criminal, todo un entramado de blanqueo de capitales, que usa cuentas falsas”. De hecho, uno de los primeros datos que piden los estafadores “es una foto del DNI que luego usan para abrir cuentas totalmente falsas a nombre de las víctimas, robándoles también la identidad”, afirma Frías, que pone de manifiesto que estos timadores “han encontrado un caldo de cultivo rápido en la red”.
“Nuestra lucha es que se nos reconozca como colectivo de víctimas”, aclara la cara visible de ANCEME, que asegura que “ante cualquier delito nuevo tiene que haber una adaptación de la ley”. Ante la posibilidad de recuperar el dinero, Blanca admite que es “muy complicado, prácticamente imposible”, y explica que el objetivo de la asociación no es otro que “desmantelar estas organizaciones, que están dejando familias destrozadas sin recursos y exigir una responsabilidad al Estado”.
Síntomas de alerta
El mejor arma en este tipo de estafas es la prevención y revisar los perfiles de las redes sociales antes de aceptar un mensaje o una solicitud de amistad. Como síntomas de alerta, Blanca pone el foco sobre los perfiles vacíos, los nombres que tienen varias cuentas en redes sociales, o el hecho de tener pocas publicaciones y seguidores. “Hay un dato muy sencillo, que es mirar cuántas veces ha cambiado el nombre de usuario”, explica Frías, que matiza que “hay un tipo de profesiones que son muy típicas como médicos, militares o hasta embajadores de la ONU. También muchos de ellos dicen que son viudos”.
Como recomendación, Blanca propone buscar el supuesto nombre en google, “esa información te puede llevar a su nombre en otras redes sociales, incluso te puede alertar de que se trata de un estafador”.
La estafa con manipulación emocional va más allá de las graves pérdidas económicas, y pasa por dejar a familias destrozadas y sin recursos y por la vergüenza y la culpabilidad de muchas personas que han sufrido este tipo de estafas. Va más allá de lo tangible, ya que también conllevan un duelo y una pérdida personal, además de dejar deudas y unas cuantías económicas que resultan prácticamente irrecuperables en la mayoría de los casos.