El portero checo del Albacete Balompié fue el mejor de su equipo en el partido ante el Racing de Ferrol, deteniendo dos lanzamientos desde el punto de penalti y salvando un punto en el descuento para los de Rubén Albés. Vaclík fue lo más destacable en un Albacete que fue de más a menos y que en la segunda mitad se vino abajo, persiguiendo sombras más que jugando al fútbol y que tiene un futuro muy negro por delante. Menos luces y más goles, sería el resumen a una semana en la que el Alba se jugaba la vida y que desde el club decidieron que lo importante es que el Carlos Belmonte estrenaba iluminación.
El portero checo del Albacete Balompié fue el verdadero protagonista del encuentro ante el Racing de Ferrol tras detener dos penaltis y salvar un punto para los de Rubén Albés, argumentando tras el duelo en sala de prensa que “hemos sumado un punto, pero la situación es muy difícil. El equipo quiere trabajar y pelear, y estamos vivos por dentro. Estoy convencido de que podemos atajar la racha de malos resultados. Hay que pelear con todo y vamos a vaciarnos para conseguir los tres puntos el sábado ante el Huesca”.
Reconoció el checo ante los micros que “nunca había parado en mi carrera dos penaltis en un partido”, ironizando y bromeando después que “eso ya pasó aquí en el Carlos Belmonte con Pacheco el día del Espanyol. Debe ser que este estadio es propicio para que los porteros paremos dos penaltis en un partido”.
El Albacete tiene que ganar de una vez por todas
Añadió Vaclík a su discurso que “nos queda mal sabor de boca porque queríamos ganar, pero hay que darle importancia al punto. La situación es complicada y hay que sumar de tres en tres de una vez. Los rivales están ganando y nosotros tenemos que hacerlo también. Hay que prepararse y descansar bien porque el sábado tenemos una nueva oportunidad”.
Sobre su rodilla y la cojera que presenta, dijo el portero del Albacete que “físicamente estoy bien. El mister tiró de ironía. Estoy feliz de haber ayudado al equipo. Miro hacia delante para vaciarnos por salvar al equipo”.
Respecto a sus dos intervenciones ante los lanzamientos del punto de penalti, dijo el ’25’ del Albacete que “antes del inicio del partido habíamos revisado qué podía pasar si había penaltis. He pensado varias opciones en cada uno de los lanzamientos, pero he elegido las correctas. En el segundo penalti, por ejemplo, oí gritar a un jugador del Racing de Ferrol y eso me hizo decantarme por quedarme en el centro porque estaba seguro de que ese grito animó al lanzador del rival a asegurar tirando al centro después de haber parado yo el primer lanzamiento”.
