Un vecino de Albacete sigue vivo gracias a estos agentes de la Policía Local

La intervención de estos policías logra salvar la vida de un hombre en Albacete

José Luis Guillén y Blanca Hernández se han convertido en los ángeles de la guarda de Juan José, un albaceteño que sufría una parada cardiaca el pasado jueves, 18 de enero en las inmediaciones de la Plaza de Toros de Albacete.

La primordial intervención de estos dos agentes de la Policía Local de Albacete, unida a la celeridad del aviso por parte del conductor de una grúa municipal y a la inesperada presencia de dos médicas del Hospital de Villarrobledo sirvió para salvar la vida a este albaceteño. Al respecto, explicaba José Luis Guillén que “la rapidez de nuestro compañero conductor de grúa fue fundamental”, añadiendo que “nos dio el aviso en cuanto vio que este señor se encontraba mal y nosotros estábamos a escasos metros del lugar”.

Los agentes de la Policía Local de Albacete, Guillén y Hernández

Pero además, subrayaba que “también fue una suerte contar con un desfibrilador en nuestro vehículo patrulla”. Y es que esta herramienta “ayudó a la hora de hacer las maniobras de reanimación, junto con dos sanitarias que casualmente pasaban por allí”, sostenía este policía. Un cúmulo de circunstancias que se unieron y que derivaron en este resultado tan positivo, llegando a salvar la vida de este vecino de Albacete.


El policía José Luis Guillén

Salvan la vida de un vecino de Albacete

Relataba sobre lo ocurrido que tras el rápido aviso, cuando estos agentes de Policía Local se personaron en el lugar “vimos a este señor sentado en un banco y con muy mal aspecto”. De modo que, rápidamente solicitaron la presencia de una UVI móvil en el lugar para atenderlo y procedieron a ponerlo en posición lateral de seguridad. Fue en ese preciso instante “en el que nosotros junto con las médicos que pasaban por allí nos dimos cuenta de que había entrado en parada”, indicaba José Luis Guillén a El Digital de Albacete.

Momento de máxima tensión en el que decidieron hacer uso del desfibrilador con el que están equipados los vehículos de la Policía Local de Albacete para tratar de revertir la situación en la que se entraba la persona afectada. “Echamos mano del desfibrilador que teníamos junto con las maniobras de RCP e iniciamos la reanimación de este hombre hasta que al final pudimos estabilizarlo”, exponía este policía. 

Su compañera, Blanca Hernández, confesaba que la presencia de esta herramienta en los coches patrulla de la Policía Local “es vital” explicando que con la maniobra de Reanimación Cardiopulmonar (RCP) consiguen que el cuerpo del afectado continúe bombeando sangre, pero el desfibrilador es crucial en estos casos. Como si de un milagro se tratara, así definía esta agente de Policía lo ocurrido y es que “cuando ves que el desfibrilador actúa y que la persona vuelve, es como presenciar casi que un milagro”.

La policía Blanca Hernández

Profesionalidad y humanidad en la Policía Local de Albacete

Las casualidades, el azar o la suerte muchas veces son cruciales en este tipo de situaciones a vida o muerte, pero sin duda la profesionalidad, la vocación y la humanidad de estos profesionales son cruciales. Detrás del uniforme hay personas humanas que sienten orgullo y felicidad al ver que este tipo de soluciones se resuelven de forma positiva, pero que también se llevan a casa una mochila de sentimientos en el que caso de que el resultado no sea el esperado. 

“Para nosotros en cada intervención que hacemos intentamos dar lo mejor de nosotros mismos”, expresaba Blanca Hernández, reconociendo que “esta vez hemos tenido la suerte de que todo ha salido bien y nos hemos llevado esa gratificación, pero otras veces no sale todo bien y también te vas a casa dándole vueltas”. De este modo, aseguraba que “salvarle la vida a una persona es lo máximo que nos puede pasar” y se mostraba orgullosa de que todo haya ayudado a que Juan José haya vuelto a nacer.

Un sentimiento que también compartía su compañero, quien reconocía que “en otras ocasiones hemos intervenido con situaciones similares y el resultado no ha sido el deseable”. Pero afortunadamente, gracias a todos los factores favorables que se dieron en esta intervención “por suerte pudimos reanimar a esta persona y revertir la situación en la que se encontraba”. Un impecable trabajo del que aseguran sentirse “satisfechos” y que supone un motivo de alegría para toda la plantilla que forma parte de la Policía Local de Albacete.

Los agentes de la Policía Local de Albacete, Guillén y Hernández

Formación crucial para salvar vidas en Albacete

Hacían especial hincapié en que en situaciones como a la que tuvieron que hacer frente es fundamental recibir una correcta formación. Todo el personal de la Policía Local de Albacete recibe diferente cursos de formación, entre los que se encuentra el de RCP, un aprendizaje crucial que de forma sencilla permite salvar vidas. 

Sin embargo, sostenía José Luis Guillén que “no es lo mismo hacer el masaje a un muñeco durante unas prácticas que a una persona real”, ya que su vida puede depender de esta maniobra. Sobre este tipo de situaciones compartía Blanca Hernández que “en los cursos parece algo fácil pero todo cambia cuando pasa en el momento”, ya que en ese instante deben hacer frente a situaciones verdaderamente complejas y estresantes. 

Por todo ello, consideraban que esta sencilla formación debería estar al alcance de cualquier persona, para que en un momento dado puedan ayudar a salvar una vida. Y es que aprender a realizar una RCP o a reaccionar ante un atragantamiento es algo que “deberíamos saber todos y que debería enseñarse en colegios e institutos”, sostenía Hernández, argumentando que es fundamental aprender a “reaccionar” ante este tipo de situaciones de extrema gravedad, y que una rápida intervención podría suponer salvar la vida de una persona.

Los agentes de la Policía Local de Albacete, Guillén y Hernández

Un trabajo para ayudar a los demás

Esta agente de la Policía Local de Albacete aseguraba que el suyo “es un trabajo súper bonito y reconfortante”, apuntando que “te permite vivir momentos como este”. Una percepción profesional que también compartía su compañero, reconociendo que “por suerte, la mayoría de intervenciones que hacemos son gratificantes”.

Profesionalidad y vocación van de la mano en el caso de la Policía Local, ya que confesaban que “todos intentamos ayudar a los demás lo máximo posible”. Así, mostraban su alegría por haber ayudado a Juan José y a su familia y de que este vecino de Albacete a día de hoy se encuentre estable.

Igualmente, tenían palabras de agradecimiento para todas las personas que ayudaron a estos policías en esta especial intervención, tanto al conductor de la grúa que dio el aviso como a las doctoras del Hospital de Villarrobledo que los dirigieron. Y es que gracias a todas estas personas y circunstancias “Juan José puede seguir vivo”, concluía Guillén.

Marta Lopez

Periodista natural de Albacete. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Murcia con más de 6 años de experiencia en medios de comunicación.
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