El propósito del Albacete ante el Valladolid, equipo al que recibe este viernes a las 21:30 horas en el estadio Carlos Belmonte, es «ganar para desterrar el pesimismo».
Rubén Albés, técnico blanco, ya destacó la semana pasada que necesitaban un triunfo para alejarse de ese ambiente negativo que se puede generar alrededor de su conjunto, que sobresalió la campaña anterior.
El haber sido sexto y disputado los play-off de ascenso, ha elevado las exigencias del entorno del club manchego, aunque esta semana una voz autorizada como la del director deportivo, Alfonso Serrano, ha alertado: «Debemos saber de dónde venimos y dónde estábamos hace dos años para ser conscientes de hacia donde vamos», en referencia a cuando militaban en Primera división RFEF.
Un central polivalente es una de las posiciones que desea reforzar la escuadra albaceteña, especialmente después de la venta de Boyomo, que no ha contado con ningún sustituto tras irse, precisamente, a su rival de este viernes.
El preparador gallego ha destacado este jueves que le «mola» el enfrentamiento ante la escuadra pucelana, calificándolo de «partidazo» contra un «súper rival», vaticinando que su grupo deberá estar a un «súper nivel» para lograr la victoria.
Albés cuenta con las consabidas bajas del centrocampista Maestre y de los delanteros, Higinio y Pedro Benito, todos ellos por respectivas lesiones.
