Las máquinas de bolas que hacen las delicias de cualquier niño y que a día de hoy están instaladas en multitud de cafeterías, panaderías, restaurantes o establecimientos en los que puede ser habitual la presencia junto a sus padres de los más pequeños de la casa, se han convertido en el actual objeto del deseo de los amigos de lo ajeno en Albacete, sobre todo durante este mes de agosto.
De hecho, y según ha podido saber El Digital de Albacete y así se desprende su confirmación de fuentes oficiales, en la última semana han sido tres las ocasiones en las que la Policía Local de Albacete ha tenido que intervenir en asuntos relacionados con máquinas de bolas.
Arrastrando una máquina de bolas por Albacete
El primero de ellos se remonta al pasado día 16, miércoles, cuando en torno a las 15.10 horas una persona fue divisada a por la calle Calderón de la Barca arrastrando una de estas máquinas de bolas en actitud más que sospechosa.
Días después, el 19 de agosto, sábado, a las 15:46 horas, un hombre fue visto huyendo con una bicicleta arrastrando una de estas máquinas que acababa de llevarse de una panadería ubicada en las inmediaciones del Hospital de Albacete.
Robo en una cafetería de Albacete
La última intervención policial al respecto data de ayer mismo, miércoles 23 de agosto, cuando a las 18:15 horas una llamada alertó a la Policía Local de Albacete de que habían robado una máquina de bolas de una conocida cafetería ubicada en el Barrio de Medicina.
Su poco peso, su fragilidad y la facilidad para transportarlas y para abrir sus cajetines de monedas en un lugar seguro parecen ser los motivos que harían que estas máquinas de bolas se hayan convertido en el actual objeto del deseo de los cacos en Albacete.
¿Una misma persona o varias en Albacete?
Las investigaciones policiales intentarán averiguar si detrás de todos estos hechos se encuentran distintas personas o una en concreto, que esté optando en las últimas fechas por el robo de este tipo de máquinas para obtener una ilícita fuente de ingresos. El precio habitual de este tipo de bolas se situaría en 1 euro, por lo que la recaudación de cada máquina tampoco sería una cantidad desorbitada de dinero.
Cabe destacar que en la mayoría de los casos estas máquinas no son propiedad de los establecimientos donde se encuentran, sino que son empresas de ‘vending’ las que ahí las ubican y pagan un porcentaje al local que las pone a disposición del público en general.
