El Albacete ha ratificado su buen momento al encadenar su quinta jornada seguida sin perder después de empatar sin goles en el campo del Levante (0-0) y pese a que jugó con un hombre menos durante 50 minutos.
La discutida expulsión de Maikel Mesa condicionó un encuentro en el que el técnico del cuadro manchego, Rubén Albés, manifestó al acabar el choque que “nos quedamos con ganas de saber qué hubiera pasado de acabar once contra once. La expulsión de Maikel es inexplicable”.
Para el preparador gallego su equipo completó un partido “brutal” en el que, a su juicio, “fuimos mejores cuando estábamos igualados y supimos minimizar sus opciones con mucho corazón, esfuerzo y buena organización defensiva” en la segunda parte.
“Realizamos los cambios, además, para ver si podíamos tener alguna ocasión de contraataque como la de Bolívar y hemos sido valientes como prometíamos por lo que estoy realmente feliz con lo que ha mostrado mi equipo”, añadió.
Asimismo, calificó también de “brutal” la respuesta de sus seguidores porque “se ha mostrado como una afición de equipo grande, que se desplaza masivamente, y fue un ejemplo de lo bonito que es este espectáculo cuando la gente que te sigue es protagonista”, ha declarado.
El punto ante el Levante permite al Albacete alcanzar los 51 puntos y aumenta a seis su distancia respecto al Burgos, séptimo clasificado, y a siete al Cartagena, octavo en la tabla.
