La huelga del calzado ha tenido un seguimiento de en torno al 90 % en las empresas de Castilla-La Mancha del sector, según ha indicado Comisiones Obreras, que ha celebrado el “éxito” del paro, convocado para pedir un aumento de salarios que evite la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores.
El secretario general de CCOO-Industrias de Castilla-La Mancha, Ángel León, ha valorado en Fuensalida (Toledo) el seguimiento que ha tenido el paro en las empresas del sector en la región, que ha cifrado en el 90 % de los empleados, lo que a su juicio pone de manifiesto que “la gente entendido que tenía que parar si quería, de alguna manera, avanzar en derechos y en condiciones laborales”.
León, que ha participado en la concentración que ha tenido lugar frente a la empresa Pablosky, ha considerado en un archivo sonoro remitido por CCOO que “no tiene ninguna justificación la actitud de la patronal, porque hay otros sectores del conjunto del país que si que están atendiendo las reivindicaciones del sindicato”.
En el caso del calzado, CCOO apuesta es garantizar que los trabajadores y trabajadoras, no pierdan poder adquisitivo, ha apuntado León, que ha recordado que en Castilla-La Mancha el convenio colectivo afecta a unas 1.500 personas en la zona de Fuensalida y a unas 3.000 personas en Almansa (Albacete), por lo que es un sector importante para la región.
Asimismo, ha comentado que parece que la patronal va a tener una reunión “para intentar hacer una valoración de lo que ha ocurrido hoy con esta paralización”, y le ha pedido que cambie sus planteamientos.
El secretario regional de CCOO-Industria, ha reclamado a la patronal “que deje a un lado el planteamiento de garantizar solo dos puntos de la inflación, mientras que nosotros lo que estamos planteando es que en el cómputo de la vigencia del convenio colectivo se garantice el porcentaje mínimo que nosotros estamos reclamando en la mesa de convenio colectivo”.
“Estamos defendiendo que un sector como el del calzado tiene que apostar por la competitividad, por la innovación, por el desarrollo de los productos y lo que no pueden hacer es competir con los bajos salarios, mileuristas, que tienen el conjunto de trabajadores y trabajadoras del sector”, ha añadido.
Y ha abogado por que “ante la alta inflación, las empresas, después de los beneficios que están teniendo, después de recibir las ayudas que les está dando el Gobierno, sean corresponsables con las plantillas y atiendan las reivindicaciones de los trabajadores”.