En los últimos tiempos es muy habitual ver sobre los cielos de Albacete y de toda España estelas que se forman tras el paso de aviones, abriendo estas un gran debate entre las personas que piensan que “nos están fumigando” y que lo hacen “para que no llueva”, “para controlar la natalidad” o vaya usted a pensar qué, y los científicos, que tratan de divulgar entre la sociedad qué son realmente estas estelas, el motivo por el que se producen y las consecuencias o la ausencia de ellas sobre las personas.

Para comenzar a aportar luz a este asunto lo mejor es hacerlo por el principio y para ello cabe decir para situarse que la voz inglesa ‘chemtrail’ proviene de la abreviatura de las palabras ‘Chemical’ y ‘trail’, traduciéndose por tanto literalmente ‘chemtrail’ al español como estela química.

Así pues y ante esta definición, no es de extrañar que las personas amantes de las teorías de la conspiración se aferren a ideas catastrofistas para dar un motivo a la presencia de estas estelas en el cielo, siendo tales pensamientos de lo más variopinto y a cada cual más terrible. De este modo, no es difícil encontrar a personas que aseguran que dichas estelas son para evitar que llueva, para controlar la natalidad, para modificar el clima como consecuencia de un plan de geoingeniería encubierta, etcétera.

En el lado opuesto se encuentran los científicos, que desterran el término ‘Chemtrail’ y se acogen a otra voz inglesa como ‘Contrail’, que lo que viene a decir es que no se trata de estelas químicas, sino estelas producidas por condensación y por tanto mucho menos graves y catastróficas.

El debate de ‘Chemtrail’ Vs ‘Contrail’ ha encontrado en las redes sociales un caldo de cultivo que daría para escribir ríos de tinta al respecto y cada vez son más las voces enfrentadas por las citadas estelas, siendo Alberto Nájera, científico, divulgador y profesor de la UCLM en Albacete, uno de los investigadores más activo en contra de los bulos al respecto que se pueden leer en diversos foros y a los que personajes públicos, en ocasiones, les dan pábulo.
¿Qué son y cómo se forman estas estelas que se ven sobre Albacete y otros puntos del mundo?
Según un informe publicado por la AEMET, las estelas de condensación “son nubes de hielo, en forma de largas líneas, que surgen en ocasiones al paso de un avión, por condensación del vapor de agua contenido en las emisiones de los motores”.

La AEMET también argumenta que “a veces también se forman otro tipo de estelas en la punta de las alas, por condensación del vapor atmosférico a causa de la bajada de presión y temperatura que se produce al paso del avión, pero estas últimas suelen ocurrir en el despegue y el aterrizaje, no durante el vuelo en niveles altos, y duran mucho menos” y añade que «además de vapor de agua los motores de los aviones emiten dióxido de carbono (CO2), pequeñas cantidades de óxidos de nitrógeno (NOx), hidrocarburos, monóxido de carbono, gases de azufre y partículas de hollín y metal. De todos estos gases y partículas, el vapor de agua es lo único relevante para la formación de estelas«.

Según el informe de la AEMET, “para que se formen las grandes estelas tras los aviones en ruta son necesarias unas condiciones de temperatura y humedad determinadas, que permitan que se produzca la condensación del vapor de agua emitido por los motores. Los gases de azufre pueden ayudar, porque facilitan la formación de pequeñas partículas que pueden actuar como núcleos de condensación, pero, en general, de todas formas hay suficientes partículas que sirven como núcleos de condensación en la atmósfera. El resto de los gases y partículas emitidos por el motor de los aviones no influyen en la formación de las estelas”.

La AEMET explica al respecto que «cuando los gases que emite el avión se mezclan con el aire circundante, se enfrían rápidamente y, si la humedad en la atmósfera es suficiente para que la mezcla alcance la saturación, se producirá la condensación del vapor de agua«, indicando también que «el nivel de humedad de la mezcla, es decir, el que se llegue a la saturación o no, dependerá de la temperatura y humedad del aire, así como de la cantidad de vapor de agua y la temperatura de las emisiones del avión«.

Distintos tipos de estelas
El informe de la AEMET también recoge que una vez que se forma una estela, «su evolución depende de las condiciones atmosféricas«.
Así, y según los datos de al Agencia Estatal de Meteorología, podemos afirmar que «hay tres tipos de estelas» y estos son los siguientes:
- Estelas de vida corta: La AEMET las define como «pequeñas líneas blancas que vemos detrás del avión, y que desaparecen casi tan rápido como pasa la aeronave. Ocurren cuando la cantidad de vapor de agua en la atmósfera es pequeña, y entonces las partículas de hielo que forman la estela vuelven al estado gaseoso rápidamente«.
- Estelas persistentes que no se extienden: Según la AEMET, «son largas líneas blancas, que permanecen después de que ha pasado el avión, pero no crecen ni se expanden. Ocurren cuando la humedad en la atmósfera es grande, por lo que la estela no se evapora (más precisamente, no se sublima), y puede durar horas«.
- Estelas persistentes que se extienden: La AEMET afirma que «son líneas que van engordando y haciéndose más anchas y de forma irregular a medida que la nube crece. Esto ocurre cuando la humedad en la atmósfera es muy próxima al nivel de condensación, y es fácil que el vapor de agua atmosférico se condense sobre las partículas de hielo de la estela. Si además hay algo de inestabilidad y turbulencia, las estelas van tomando una forma irregular. Estas estelas, además, pueden ser desplazadas por el viento».
Galería de fotos









/FOTOS: PIXABAY/