“La primera causa de muerte en mujeres y la segunda en hombres en España es el ictus”, desvelaba la enfermera supervisora de la Unidad de Neurología del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete, Ana Belén Flores. Además, esta profesional destacaba El Digital de Albacete que “se considera que cada 6 minutos hay una persona que sufre un ictus en España”.
Unas demoledoras cifras que compartía con motivo de la celebración del Día Mundial del Ictus, que se conmemora este 29 de octubre. De este modo, explicaba que “el ictus se produce cuando hay una disminución brusca de la sangre que llega al cerebro”. Por tanto, detallaba Ana Belén Flores que esta dolencia puede deberse “a un coágulo que haya obstruido una zona y la haya dejado sin riego”, pero aclaraba que un ictus también puede producirse “por una hemorragia que haya encharcado una zona, siendo normalmente por la rotura de una de las arterias cerebrales”.

¿Cuáles son los síntomas a los que estar alerta para detectar un ictus?
Subrayaba la enfermera supervisora de la Unidad de Neurología el Hospital de Albacete que “el diagnóstico del ictus es clínico y tras ello se realizan al paciente numeras pruebas médicas”. Explicaba cuáles son los síntomas a los que debemos estar alerta para detectar un ictus, poniendo de relieve que uno de los más llamativos se encuentra “en la comisura de los labios torcida”.
Al respecto, destacaba que para poder comprobar que se trata de un ictus los facultativos piden al paciente “que sonría y muestre los dientes”. Con esta sencilla prueba “podemos ver claramente que hay una zona que está más debilitada y la cara se queda de una forma que no es simétrica”, aclaraba la enfermera.
“Otro de estos signos pasa por valorar si hay una alteración motora”, manifestaba Ana Belén Flores. Para ello, “pedimos al paciente que levante ambos brazos y que los mantenga en esa posición”. Así, señalaba que “en el caso de no poder subir o mantener alguno de los brazos puede indicar que se trata de un ictus”, y añadía que “esta misma prueba se puede hacer también con las piernas”.
Y es que recordaba que “cuando se produce un ictus siempre suele estar afectada una de las áreas del cerebro y se refleja en una de las mitades de nuestro cuerpo. Es a lo que llamamos muchas veces hemiplejia”. Se trata de la “pérdida de la fuerza o la sensibilidad en la pierna o el brazo de la parte del cerebro afectada por el ictus”, remarcaba.
Pero además, expresaba que “también podemos diagnosticar un ictus por la dificultad para hablar que muestra el paciente, no solo para pronunciar las palabras, sino porque hay veces que no son capaces de comprender lo que les estamos diciendo y no son capaces de expresar de forma coherente sus respuestas”. Igualmente destacaba que “si el campo afectado del cerebro es el área visual puede producirse una alteración en la visión muy fuerte, como dejar de ver o que el paciente vea borroso”.
Finalmente detallaba que otro de los signos a los que debemos de prestar atención para diagnosticar un ictus es el dolor de cabeza. “En los ictus hemorrágicos se produce un dolor de cabeza muy fuerte y muy repentino”, explicaba Ana Belén Flores, confesando que “los pacientes lo detienen como el dolor de cabeza más fuerte que han tenido nunca”.

¿Cómo actuar en el caso de detectar un ictus?
“Si detectamos alguno de estos síntomas, aunque solo sea uno de ellos, estamos ante un posible ictus”, recordaba, motivo por el que trasladaba cuál es la manera correcta de actuar en caso de detectarse esta dolencia. Al respecto manifestaba que “lo primero que tenemos que hacer es avisar al 112 y en el tiempo en el que el personal sanitario tarde en llegar tenemos que aprovecharlo para anotar cuándo se iniciaron los síntomas, cuáles han sido, si el paciente está tomando alguna medicación o si tiene alguna enfermedad, y no darle nada de comer ni de beber”.
Mayor mortalidad en mujeres pero más hombres afectados por los ictus
Trasladaba a El Digital de Albacete que en el último año “se ha producido un casi imperceptible repunte” de ictus en el Hospital de Albacete, especificando que esta cifra “no se ha elevado más de un 6% con respecto a años anteriores y se trata de casos graves en los que se ha activado el Código Ictus”. Del mismo modo aclaraba que “tampoco se han producido cambios significativos de esta afección a hombres y a mujeres”, matizando que “afecta más a los hombres suponiendo el 60% de los casos de ictus tratados frente al 40% detectados en mujeres”.
Se trata de un llamativo dato, el hecho de que el ictus afecte más a los hombres pese a ser la principal causa de muerte entre las mujeres de nuestro país. Esto se debe a que “las mujeres viven más años que los hombres en España y lo que supone que tengan más enfermedades asociadas”, explicaba Ana Belén Flores. Por tanto, “cuando se ponen enfermas hay un mayor porcentaje de mujeres que mueren”, detallaba.

Del mismo modo, también aclaraba la enfermera supervisora de la Unidad de Neurología del Hospital de Albacete que “esto también sucede porque a las mujeres les cuesta más diferenciar estos síntomas de alerta, porque hay más mujeres que viven solas, o porque damos menos importancia a los síntomas que los hombres”. Así, consideraba que “los hombres acuden antes a Urgencias tras detectar alguno de los posibles síntomas de un ictus”, mientras que en el caso de las mujeres que llegan con un ictus a Urgencias “lo hacen en peores condiciones, con ictus más serios y con más probabilidades de muerte”.
Recuerdan en Albacete que “el 90% de los casos de ictus se pueden prevenir”
Pese a todo ello, ponía de relieve Ana Belén Flores que “el 90% de los casos de ictus se pueden prevenir controlando los factores de riesgo y poniendo en práctica cosas muy sencillas”. Para eso “tenemos que tener una tensión arterial en rango, mantener los niveles de azúcar en sangre (glucemia), y el colesterol”.
Con el objetivo de reducir el riesgo de sufrir un ictus recomendaba a la población albaceteña “tener una dieta equilibrada, comiendo más fruta y verdura e intentar retirar de nuestra dieta la sal, las grasas y los alimentos procesados”. Pero sobre todo, es crucial para no sufrir un ictus “evitar por completo fumar y no consumir alcohol”.

Del mismo modo, apuntaba que también “hay que incluir la actividad física”, y recordaba que “está estipulado caminar, por lo menos, una hora al día”. Además desvelaba que es fundamental para la prevención del ictus “reducir el estrés”.
Se trata de pasos sencillos que “debemos tomarnos en serio, más aún cuando es relativamente fácil prevenirlo”, consideraba. Además ponía de manifiesto Ana Belén Flores que “el ictus tiene un alto grado de recurrencia, por lo que estas medidas las tenemos que mantener después de sufrir un ictus para evitar que pueda repetirse”.
Las secuelas en los pacientes de ictus y la puesta en marcha en el Hospital de Albacete del proyecto ‘Escuela de Familias’
“Aproximadamente la mitad de los pacientes que reciben el alta tras sufrir un ictus se irán a casa con algún tipo de secuela”, expresaba la enfermera supervisora de la Unidad de Neurología del Hospital de Albacete. En concreto, señalaba que “muchos de estos pacientes precisarán rehabilitación funciona para recuperarse”.

Detallaba que “las secuelas suelen ser debilidad o parálisis de alguna parte del cuerpo, pero los pacientes también pueden tener secuelas a nivel cognitivo y no puedan recuperar la capacidad para comunicarse”, especificando que “será una capacidad que irán recuperando poco a poco”.
Por todo ello, destacaba que “desde la Unidad del Ictus con la que cuenta el Hospital de Albacete hemos creado un proyecto que se llama ‘Escuela de Familias’”. Se trata de una iniciativa en la que “se trabaja en educar a los familiares del paciente afectado para que sepan manejar la situación, manejar al paciente físicamente y también a nivel conductual”. En concreto “hacemos reuniones semanales para informales de todas estas cosas”, verdaderamente cruciales en la recuperación de los pacientes y que también afectan al núcleo familiar.

Guía de Buenas Prácticas ‘Valoración del ictus mediante la atención continuada’ en el Hospital de Albacete
Ana Belén Flores ha sido una de las enfermeras responsables de la implantación de la guía de Buenas Prácticas ‘Valoración del ictus mediante la atención continuada’ en el Hospital de Albacete. Al respecto trasladaba que “nuestro hospital está comprometido con los cuidados de excelencia y para ello vamos incluyendo las guías de trabajo que consideramos que podemos mantener y que son beneficiosas para los pacientes”.
El Hospital de Albacete cuenta con una Unidad del Ictus desde 2009 y “en 2015 consideramos que estábamos preparados para introducir todas las recomendaciones que nos pide esta guía”, explicaba. En concreto detallaba que “son unos cuidados basados en la evidencia que van a reportar beneficios al paciente y están todos científicamente comprobados”.
Señalaba que “las guías nos van a marcar una serie de pautas y de registros que tenemos que llevar con este tipo de pacientes, por lo que todo el trabajo está protocolarizado”. Del mismo modo recordaba que “son unas pautas que tenemos que cumplirán todos los pacientes y que tenemos que registrar en nuestro programa informático”.
Así, para fomentar la prevención del ictus y dar a conocer interesantes aspectos sobre esta dolencia desde el Complejo Hospitalario Universitario de Albacete se han desarrollado diversas actividades durante los días 27 y 28 de octubre.

