Apadrina un vencejo en Albacete

Una campaña del Centro de Recuperación de Fauna Silvestre

Cada año crece el número de vencejos que, con la llegada de los calores del verano, caen de sus nidos. Por esta razón, el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Albacete ha puesto en marcha su campaña ‘Apadrina un vencejo’, una iniciativa destinada a la crianza de esta ave protegida.

‘Apadrina un vencejo’ nació en 2013, y desde entonces se ha llevado a cabo con gran éxito. Sergio Gallego, veterinario del Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Albacete, nos cuenta que “en un principio, la recuperación de los vencejos era algo que gestionaba el centro solo, pero debido al aumento de caídas y de avisos se volvió insostenible. Los vencejos requieren mucha atención. Como mínimo, comen cada tres horas y deben estar bien hidratados. Además, hay que atenderlos y tratarlos, y era inviable hacerlo con el personal con el que contábamos. Hay que tener en cuenta que no solo llegan vencejos al centro. En la temporada de verano entran otras muchas rapaces, crías de primillas, autillos, y muchos animales a los que también tenemos que atender”.

Sergio Gallego veterinario del Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Albacete
Sergio Gallego veterinario del Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Albacete

700 vencejos recuperados este año en la provincia

De este modo, anualmente se convoca en Albacete la campaña ‘Apadrina un vencejo’ para la crianza de estas aves. Un innovador proyecto que “partió de la idea de mi compañero, Jesús López, de buscar voluntarios que quisieran ayudarnos en esta tarea. Y es que, ha habido veces que el número de vencejos caídos nos ha desbordado. El hecho de que alguien nos ayude llevándose alguno a su casa para cuidarlo durante unos días, a nosotros nos hace un mundo”, confiesa Gallego, añadiendo que “gracias a todas estas colaboraciones tenemos una tasa de recuperación de un 85%, y esta temporada se han podido recuperar cerca de 700 vencejos en toda la provincia. Cada vez son más las personas que nos ayudan a sacar esto adelante”.

Un vencejo caído del nido
Un vencejo caído del nido

El tiempo de adopción depende de muchos factores, pero el periodo de cría de un vencejo, desde que nace, hasta que está preparado para volar, gira en torno a los 40 días. Sergio Gallego aclara que “la crianza del vencejo no es difícil, solo hay que echarle tiempo y dedicación. Desde el centro, informamos de cómo se tiene que proceder a la hora de adoptar un vencejo. También proporcionamos el alimento, las vitaminas, y todo lo que se pueda necesitar. Este año ha habido un gasto de cerca de 4000 euros para la alimentación de estas aves”.

Vencejo alimentado por este veterinario en Albacete
Vencejo alimentado por este veterinario en Albacete

Esta singular campaña ha despertado el interés de asociaciones que también han querido sumarse para aportar su granito de arena. “Hay muchas asociaciones, como ‘SOS Vencejos’ o ‘SOS Aves Albacete’, que han querido colaborar con nosotros y nos descargan de mucho trabajo. También tenemos la colaboración de asociaciones en pueblos, como es el caso de ‘Aula Verde’ en Chinchilla, la asociación ‘Vencejos Almansa’, o la asociación ‘Amigos de la Naturaleza’ de Villarrobledo, que están haciendo una gran labor encargándose de todos los vencejos de su zona”, reconoce.  

Vencejo alimentado por este veterinario en Albacete
Vencejo alimentado por este veterinario en Albacete

Emilio y Carolina, taxistas y amantes de los animales

Emilio Navarro y Carolina Asensio, una pareja de taxistas de Albacete que, además de compartir profesión, llevan 37 años casados y 8 de novios, se han implicado de lleno en esta iniciativa. “Somos amantes de los animales, y encontramos muchos vencejos caídos en esta época del año. Sabemos que muchas veces no dan abasto en el centro para salir a recogerlos, por lo que nos ofrecimos a hacerlo cuando lo necesitaran. A nosotros, que estamos siempre en la calle, no nos cuesta recogerlos y llevarlos, incluso a veces nos los hemos quedado unos días hasta que han podido volar. Este año hemos cuidado a tres en casa, y estamos muy contentos de haberlos recuperado. Nos hace feliz poder hacer algo por estos animalicos y colaborar un poquito con la naturaleza”, señala Navarro.

Emilio y Carolina, taxistas y amantes de los animales
Emilio y Carolina, taxistas y amantes de los animales

Los vencejos viven en el aire

Los vencejos son aves migratorias estivales, que vienen a nuestras tierras con el propósito de reproducirse durante la primavera y el verano. Viven prácticamente toda su vida volando sin posarse. Comen, duermen e incluso copulan volando. Solo se posan en la época de cría para poner los huevos e incubarlos. En ese momento, a mediados del mes de junio, es cuando comienza esta singular campaña. El veterinario explica que “los vencejos no construyen nidos, simplemente aprovechan las oquedades en las edificaciones para anidar. Muchas veces, estos nidos se encuentran en lugares que se calientan mucho por el sol. Es entonces cuando los pollos salen a refrescarse y caen, ya que no tienen todavía plumas ni el desarrollo suficiente para poder volar. Además, los progenitores no los pueden recoger, debido a que sus patas son muy cortas y no le sirven para andar, saltar, o coger impulso como a otras aves, sino solo para agarrarse a salientes o a la hembra en la cópula”.

Vencejo / Asociación Amigos de la Naturaleza de Villarrobledo
Vencejo / Asociación Amigos de la Naturaleza de Villarrobledo

Qué hacer si nos encontramos un vencejo

Si alguien se encuentra un vencejo que ha caído, lo primero que debe hacer es ponerse en contacto con el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre. “Nosotros vamos a recogerlo donde esté, pero damos la posibilidad de que, la persona que lo ha encontrado, pueda quedárselo unos días para cuidarlo hasta que coja fuerzas y pueda echar a volar. La mejor forma de recogerlos es en una caja de zapatos, que se debe cambiar días después por una más grande para que puedan ir ejercitando las alas. Normalmente, cuando caen del nido, suelen aparecer muy deshidratados, por lo que se le deben administrar unas gotitas de agua en la comisura del pico con una jeringuilla. Luego hay que empezar a alimentarlo. Los vencejos, al igual que los aviones y las golondrinas, son insectívoros. Hay que alimentarlos solo con insectos, tales como grillos o tenebrios, porque otro tipo de alimentación puede provocarles problemas nutricionales”, destaca. 

Liberación de un vencejo
Liberación de un vencejo- Foto cedida

La liberación del vencejo

Cuando el vencejo logre estar más activo, con más vitalidad, tenga un peso adecuado y la longitud de sus plumas sean óptimas para el vuelo, habrá llegado el momento de su liberación. “Se necesita un lugar despejado, pero nunca elevado, pues no estamos seguros de que vaya a volar al primer intento. Nos limitaremos a ponerlo en la palma de la mano en alto, dejándole libertad para que decida cuando quiere saltar. Debemos darle su tiempo, pues será la primera vez que vuele, y cuando esté preparado para irse lo hará por su propio instinto. Se puede mover un poco el brazo para animarle a que se lance, pero nunca lanzarlo nosotros, pues podría caer y hacerse daño. Normalmente, cuando se deciden, caen un poco y remontan el vuelo. Si cae al suelo se puede recoger para darle otra oportunidad”, concluye. 

‘Apadrina un vencejo’, una iniciativa que ayuda a estas aves a salir adelante y volar, para que cada primavera vuelvan a visitarnos y a llenar nuestros cielos con sus maravillosos giros y piruetas.

Modesto Colorado

Comunicador y cantante de Albacete. Más de 20 años de experiencia en medios de comunicación, especializado en información y reportajes de ámbito cultural.
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