MAR ABIERTO | Suma y sigue

Artículo de opinión de Amelia F Fernández-Pacheco

La congoja en el corazón del hombre lo abate … (Prov. 12.25).

Hablar de prioridades, sin especificar respecto a qué, pretende dar por válido que el contexto es cualquier ámbito de la vida y eso, es no ir bien. Las prioridades se establecen en relación a un medio concreto y en un entorno determinado específicamente y es que sí, se pongan como se pongan, tratar de llevar las prioridades al mundo abstracto no solo es tratar de imponer las prioridades propias a las ajenas, es anteponerlas al interés general y pretender que recaiga una asunción de compromisos y responsabilidades sobre terceros que en nada les corresponden, competen o interesan. Lo que aparentemente es una exposición de motivos y un argumentario hecho a base de palabrejas, sí palabrejas, porque no tienen contexto ni certeza que las sustente, es en definitiva una pretendida justificación para someter a un grupo del tamaño que sea a los designios de un tirano. Y ya les adelanto que ninguno acaba bien, ni el presidente de la comunidad de vecinos ni el de los EEUU.

El uso de términos que soportan conceptos subjetivos en la generalidad de una exposición es una competencia de la psicología de masas con la que nos ametrallan sin descanso. No insistan en que quien calla otorga porque es solo un refrán, no es consentimiento, no comprende el valor jurídico del silencio. Esto para el día a día porque en España ya tenemos a muchas señoras Ayuso que han declarado que no apagan, que no a eso de poner hasta el 1 de noviembre de 2023 la calefacción en invierno (19º), el aire en verano (27º) y a la policía mirando los termostatos. Ya veremos si el Decreto Ley lo aprueba el Congreso y ya veremos los impuestos verdes que van a teñir de negro el otoño. Y que no a muchas otras cosas, ya las gentes en todas las naciones empiezan a hablar claro y piden que se replantee la fiesta en los círculos europeos. Están nerviosos porque todos, además de empezar a acordarnos de las medidas climáticas a 14º de Ceaușescu, hemos empezado a atar cabos. 

Miren al hilo de los comentarios ,The Sun, publicó en 2020, el 20 de noviembre, que Ayman Al-Zawahiri había muerto y ahora resulta que lo ha matado EEUU con un dron sin daños colaterales. Pues claro, lleva dos años enterrado. ¿Habrán matado a otro? o es solo para justificar la oleada de ataques terroristas que se nos van a presentar por todos lados y los desplazamientos África-Europa. Esto me suena a agitar el avispero. Como Pelosi en Taiwán, lo próximo será pedirnos que no comerciemos con China.

En España tenemos recursos bastantes para no tener que enfrentarnos a esto pero miren, no hay mal que por bien no venga ( ni que 100 años dure), este imperialismo de EEUU y UK que intenta vertebrarse a través de la UE colándose por las ventanas de nuestras casas, no solo sirve para que muchos coloquen los países en el mapa sino para que se hagan preguntas y cada día habrá más indagaciones y más consultas y más porqués impregnados de rabia, cada día hay más paro, más hambre y más dolor de ese que duele en los ojos del ser querido y esas miradas son las que sacan la espada y empuñan el látigo. Me atrevo a decir que el punto es de no retorno, como cuando te entra el diablo en una noche de concierto. Veremos qué pasa cuando nuestro corazón no aguante el dolor en los ojos amados. 

Amnistía Internacional afirma que Ucrania está violando las leyes de guerra, poniendo en peligro a la población civil, porque el ejército establece sus bases en zonas residenciales que incluyen colegios, hospitales y centros comerciales pero mientras, la primera dama Elena Zelenskaya, aparece con un abrigo azul noche, cerrándolo con la mano sobre el pecho y el pelo al viento ante un Antonov derribado, junto a modelos soldado que portan equipamiento militar de reconocidas marcas mundiales para el reportaje de Vogue, todo normal en tiempos de guerra; bien pues sepan que la escenificación de esa imagen en el aeropuerto de Gostomel, costó 83.000 US$, casi lo que el total del contrato de la playa de la Sra. Montero, sin cuantificar indemnizaciones, claro. Toda esta hediondez creen que la tapan con el titular “retrato de valentía”. Valentía escriben, qué cuajo, si yo fuera lectora de una revista que se dirige a su público como si no supiera distinguir entre significante y significado, dejaba de comprarla. Pues así es todo, cómo no vamos a despertarnos, ah! y olvídense del covid, que sí que hay pero que las medidas de ventilación ya no importan, de aquí a septiembre hay que cerrarlo todo, nos quieren unas Gretas del cambio climático, no del cuidado del planeta que es lo importante y sí es producido por las acciones que acometemos todos. En fin, lo publica Time poniendo la tirita antes del daño, directamente señala que abordarlo significa una transformación rápida y total del sistema alimentario mundial.  Venga, todos a comer gusanos. 

Solo Meloni declara que en Italia se siembra, por el momento solo ella pero ya veremos qué pasa porque después de echar a Draghi, con Berlusconi nadando entre las aguas, la maquinaria del sistema mediático a tope como a full están los agricultores por toda Italia, pues eso, veremos qué pasa, de momento traigo al recuerdo que aquí en España tenemos muchos millones de hectáreas aptas para el cultivo, desaprovechadas. Las eléctricas vaciando los pantanos, se vuelan las centrales térmicas para poner molinos donde se suceden los incendios, la nuclear que nos la venda Francia y nos la traemos con los residuos, que las nuestras ya las hemos amortizado… ¿O todavía no y lo que pasa es que somos unos chulapos?, al carbón ni lo nombramos, sabemos que en Alemania se han puesto muy seriamente con ello, como los franceses con las nucleares. Todo reeditado verde. Suma y sigue. 

¿Díganme en qué estamos pensando?

Amelia  F Fernández-Pacheco

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