El deporte femenino cuenta con mayor presencia en todos los ámbitos y niveles. Mireia Rodríguez ha sido la última en entrar a formar parte de la historia del balonmano de Castilla-La Mancha.
En concreto, se ha convertido en la primera jugadora inscrita para competir en una competición senior masculina española después de que la Federación de Balonmano de Castilla-La Mancha autorizase su inscripción en el Club Balonmano Albacete, equipo que actualmente juega en la Segunda División Territorial.
“Yo solo quería jugar al balonmano”, confesaba Mireia Rodríguez a El Digital de Albacete, quien consideraba que la repercusión de la noticia “supone demasiados galones y mucho peso”. De este modo se mostraba especialmente orgullosa que gracias a su decisión y al visto bueno de la Federación “cada vez haya más niños y niñas que apuesten por jugar al balonmano”, y añadía que “si a alguien le ha podido ayudar el hecho de que al final yo pueda competir me hace estar especialmente contenta”.
Apuntaba la jugadora del Club Balonmano Albacete que “me gusta que haya vuelto el balonmano a la ciudad y que este proyecto deportivo apueste por la cantera porque los niños y niñas son el futuro de este deporte en Albacete”. Al respecto señalaba Francisco Roldán, miembro de la directiva del Club que “en 2003 el balonmano prácticamente desapareció en Albacete”.
De este modo explicaba que durante una reunión de antiguos jugadores en 2018 “decidimos crear la Asociación de Amigos de Balonmano porque no había nada de balonmano en la ciudad de Albacete”. Apenas un año más tarde “decidimos crear un club de balonmano real”, que disputó su primera temporada en 2019.
Apuntaba que durante estas dos primeras temporadas no han podido crear un equipo femenino, pero “teníamos algunas chicas que entrenaban con el primer equipo”. Relataba Francisco Roldán que “este verano recibimos una inesperada llamada de Mireia indicando que había jugado al balonmano y que ahora lo quería hacer en Albacete”.
Mireia se sumó a los entrenamientos como una integrante más de la plantilla “e intentamos que también pudiera competir”. Una iniciativa que rápidamente fue respaldada y gracias a la que “Mireia ya tiene su licencia para poder jugar oficialmente”.
RESPALDO FAMILIAR
Mireia Rodriguez aseguraba a El Digital de Albacete que “he jugado al balonmano desde muy pequeña, prácticamente desde que empecé a andar”. De este modo puntualizaba que en su pueblo natal “este deporte es una cultura y probablemente el 80% del pueblo jugaba al balonmano”.
“Tengo la suerte de que desde pequeña mis padres, Diego y Marisa, nos han acompañado a mi hermana y a mí siempre y han estado presentes en partidos pero también en muchas horas de entreno”, declaraba agradecida de este apoyo incondicional. Mireia ha formado parte de diferentes clubes de balonmano y además confesaba “haber tenido la suerte de conocer a un loco en esta aventura que es mi marido, quien también es un enamorado del deporte como yo”.
En concreto Mireia comparte su pasión por el deporte con su compañero de vida, el jugador del Albacete Balompié, Rubén Martínez. Relataba la jugadora del Club Balonmano Albacete que “cuando llegamos a esta ciudad yo ya sabía que nos iba a traer buenas cosas”, y añadía que “la gente es muy amable y la ciudad es muy acogedora”.
La pasión y el amor por el deporte de Mireia y Rubén también se la transmiten en su día a día a su hijo. “El apoyo familiar lo es todo”, reconocía Mireia Rodríguez, al tiempo que manifestaba que “ojalá mi hijo, haga el deporte que haga, le acompañe durante toda su vida porque aprendes muchas cosas”.
UNA MÁS EN EL EQUIPO
“Mis compañeros son espectaculares”, reconocía Mireia Rodríguez con quienes comparte entrenamientos en el Pabellón de la Feria y junto a quienes defiende el balonmano de Albacete.
Señalaba que “existen diferencias físicas que tenemos que suplir”, y apuntaba que “de manera natural cuando una es madre el cuerpo cambia y tenemos que tener un plus”. Pero a la vez subrayaba que “es precisamente este plus el que te hace tener esa garra y ser más valiente”.
De este modo, Francisco Roldán aseguraba que la incorporación de Mireia al Club Balonmano Albacete ha supuesto sumar, y es que “aporta al equipo muchas cosas como velocidad y técnica”.
Sobre el histórico hito de que Mireia pueda competir en un equipo masculino señalaba que “si esto sirve para que alguien vuelva a hacer deporte y tenga la oportunidad para hacerlo, me parece lo más maravilloso del mundo”.
LA MUJER EN EL BALONMANO
Aseguraba la jugadora del Club Balonmano Albacete que “para mí el balonmano es tener amor al deporte”. Además ponía en valor Mireia Rodríguez “la nobleza del balonmano”, dejando el contacto físico dentro de la pista y apartando rivalidades fuera del terreno de juego.
Igualmente señalaba que “las chicas siempre nos hemos tenido que esforzar un poquito más”. Y ponía su caso como ejemplo indicando que “he estado en competiciones altas, pero al mismo tiempo también he tenido que trabajar y entrenar”, motivo por el que confesaba que todo este sacrificio “solo se puede hacer por algo que realmente quieres, ya que de lo contrario no se podría soportar”.
Apostaba por “ser sincero en la vida”, y reconocía que “muchas de mis compañeras que están en la élite del balonmano muchas veces se han tenido que mover de país para poder ganarse la vida con el deporte”. Pero también reconocía que “existen muchas oportunidades en torno al deporte”, poniendo como ejemplo que “muchas universidades becan a deportistas”.
Pese a todos los avances que ha experimentado la presencia de la mujer en el deporte, Francisco Roldán consideraba “muy complicado crear un equipo de balonmano femenino”. Por este motivo apuntaba por mirar a la cantera y a las generaciones futuras donde ya hay niñas que apuestan por este deporte para que se formen y el día de mañana Albacete pueda contar con un equipo femenino de balonmano.
“Creo que es válido apostar por lo que te guste y luchar por ello, con independencia de si eres hombre o mujer”, exponía Mireia Rodríguez, y añadía que “da igual lo que hagas en la vida lo importante es apostar por ello”.
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