Una carnicería de Albacete se enfrenta a su cierre si no pone fin a unos molestos ruidos

El Ayuntamiento de Albacete obliga a apagar los motores de las cámara frigorífica y las vitrinas de esta carnicería por el ruido

La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Albacete acordaba por unanimidad en su sesión del pasado 7 de octubre el cese del funcionamiento de los motores de la cámara frigorífica y las vitrinas expositoras de actividades de una carnicería.

En concreto, según se extrae del Acta de la Junta de Gobierno Local se acordaba este cese hasta que la carnicería adopte las medidas necesarias para corregir las anomalías comprobadas, debiendo ser constatadas estas mediante un certificado expedido por un técnico competente y visado por el Colegio Oficial correspondiente para su comprobación previa por los servicios técnicos municipales. Además se advertía al establecimiento de que en caso de incumplimiento podrá procederse al cese de la actividad con el objeto de evitar molestias por ruidos a terceros.

De este modo puntualizan que “el cese deberá producirse en el plazo de cinco días antes de la comunicación del acuerdo adoptado, con la advertencia de que en caso contrario “se procederá a la ejecución subsidiaria por parte del Ayuntamiento”. Un vecino del edificio en el que se encuentra la carnicería sancionada denunciaba el fuerte ruido que procedía de la cámara frigorífica y las vitrinas con las que cuenta el establecimiento. 

Así, el pasado mes de agosto los técnicos del Servicio de Salud Ambiental del Ayuntamiento de Albacete procedieron a realizar una medición de estos ruidos, comprobando que las máquinas superaban los decibelios permitidos. En concreto, se comprobó que el nivel de ruido transmitido a la vivienda afectada por el funcionamiento de la vitrina expositora del establecimiento “incumplen con lo indicado en la Ordenanza Cívica Municipal de Medio Ambiente al superar los 30 dB (A) en el interior de la vivienda”.

De este modo en noviembre de 2020 le fue notificado a la carnicería sancionada un requerimiento para que en el plazo de un mes se adoptaran las medidas necesarias” con el objetivo de evitar molestias por ruidos a las viviendas. En enero de 2021 el titular de la actividad de la carnicería presentó un escrito donde se indicaba que se habían tomado las medidas correctoras necesarias para evitar molestias por ruido.

Posteriormente, en una inspección realizada en febrero de 2021 por la Unidad Verde se comprobó que los niveles transmitidos a la vía pública por el funcionamiento de los motores de la cámara y las vitrinas incumplían lo indicado en la Ordenanza Municipal de Medio Ambiente, “al superar los 55 dB (A) para un horario entre las 8:00 y las 22:00 horas”. Así, se notificó este hecho al titular del establecimiento de que las medidas correctoras adoptadas para evitar molestias por ruido “no habían sido suficientes y que se continuaba con la tramitación del expediente”, solicitando el titular de la carnicería un aplazamiento para adoptar las medidas necesarias.

En mayo de este 2021 el Ayuntamiento de Albacete recibía un escrito del titular en el que se indicaba que se habían adoptado las medidas pertinentes para subsanar estos problemas. Sin embargo, el pasado mes de julio una vecina trasladaba de nuevo al Ayuntamiento que “continúan las molestias derivadas del funcionamiento de los motores de la actividad”.

De modo que cuando el propietario de la carnicería mejore los niveles de ruido emitidos desde el establecimiento y además, este hecho sea certificado por técnicos, la carnicería podrá volver a poner en marcha estos motores. En el caso de no solucionar este ruidoso problema podrían enfrentarse al cierre definitivo de la carnicería.

Marta Lopez

Periodista natural de Albacete. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Murcia con más de 4 años de experiencia en medios de comunicación.
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