El espacio del Taller de Arte “Art-Attelier” de Albacete, acoge la exposición colectiva ‘La copia como proceso de aprendizaje en el Arte’. Una muestra que reúne trabajos de cuatro artistas locales. Paz Ruiz, quien encabeza esta colectiva como maestra y madrina de la misma, además de los pinceles de Víctor Martínez Vázquez, Marta Polo, y Álvaro Martínez Vázquez.
La exposición ofrece una curiosa visión de interesantes apuntes, detalles y copias pictóricas basadas en la obra del pintor Diego Velázquez, uno de los principales referentes para este grupo de artistas, y que constituyen parte del proceso de su aprendizaje. Álvaro Martínez Vázquez, uno de los artistas participantes de esta muestra colectiva, graduado en Historia del Arte y apasionado de la pintura, nos cuenta que “la exposición surge a raíz de los trabajos que llevamos haciendo durante toda esta temporada. Una vez finalizada, nos dimos cuenta de que había quedado una serie muy interesante y curiosa, y propusimos entre todos realizar una muestra con todo ese material”.
El tema principal de la muestra invita a reflexionar sobre la copia de obras de los grandes maestros de la pintura como un ejercicio de aprendizaje dentro de la formación del artista. Desde la antigüedad, este sistema ha sido habitual entre los círculos de los más destacados artistas, también en los talleres y escuelas de pintura. “De la mano de nuestra profesora Paz Ruiz, Velázquez se ha convertido en un referente para nosotros. Hemos sido alumnos suyos durante muchos años, y ella, a su vez, fue alumna de otros pintores con los que tuvo la oportunidad de valorar este tipo de aprendizaje de la copia, que luego nos ha sabido trasmitir a nosotros”, detalla.
Copiar cuadros célebres de grandes maestros es un ejercicio extraordinariamente provechoso, ya que estos se erigen como verdaderos tratados de arte. Para ello, se requiere habilidad y buen conocimiento de la técnica. El artista pone de relieve que “Velázquez ofrecía una técnica clásica y académica de la pintura, pero a su vez era rompedor y muy moderno para su época, ya que tenía una soltura bastante innovadora, algo que también se puede ver en la obra de El Greco. Esos pintores eran verdaderos genios adelantados a su tiempo, y de los que es muy interesante aprender”.
Estos cuatro artistas han querido reflejar también la capacidad que tenía Velázquez para retratar la personalidad, profundizando en la parte más personal del personaje, por lo que en esta exposición se pueden encontrar varios retratos. “Hemos intentado emular esa característica, pero siempre bajo nuestra forma de interpretarlo, huyendo así de la copia explícita. Intentamos asemejarlo lo más posible para aprender y desenmarañar un poco los secretos de la técnica y entender el proceso que lleva ese tipo de pintura, para interiorizarlo y poder luego utilizar esos recursos en nuestros proyectos personales, y a raíz de todas esas experiencias, ir conformando nuestra propia personalidad en la pintura”, indica.
La exposición se compone de un total de trece obras realizadas en óleo sobre lienzo y sobre tabla, además de encontrar otros trabajos en acrílico sobre lienzo. Entre ellas encontramos varias copias completas, todas ellas en los lienzos de mayor formato. Por otro lado, se completa la muestra con otra serie de detalles y apuntes concretos extraídos de otras obras. Una interesante variedad en la que profundizar en la personalidad de los personajes, en el alma de sus miradas, en sus gestos y actitudes. El pintor explica que “cuando lo que nos llama la atención en una obra es algún detalle concreto, como puede ser la personalidad que el pintor capta en el rostro de una persona, nuestro trabajo es lograr llegar a interpretarlo e infundir ese alma tan importante en un retrato. En el caso de una composición completa, como puede ser la ‘Coronación de la Virgen’, tenemos que fijarnos en el trabajo que ha realizado el pintor con las telas, ver cómo las ha desarrollado, y beber de todo ese aprendizaje a la hora de resolver todo el entramado de telas y atuendos que tienen los personajes, para luego poder ofrecer esos matices a nuestras obras”.
Muchos grandes artistas copiaron a sus predecesores, incluso a otros contemporáneos suyos. Poussin copió a Tiziano, Van Dyck a Rubens, Rubens en su estancia en España realizaría destacadas copias y estudios de las Colecciones Reales, y artistas como Manet, Picasso o Francis Bacon copiarían e interpretarían a Velázquez. En el ámbito provincial, Benjamín Palencia realizó destacadas copias de maestros como El Greco o Velázquez. El pintor apunta que “Benjamín Palencia tuvo una etapa de aprendizaje en la que se trasladó a Madrid, y se le podía ver en el Museo del Prado haciendo copias de cuadros. El artista manchego bebió de esa técnica tan novedosa que tuvo El Greco en su tiempo. Con esta exposición hemos querido emular esa práctica de la copia como un proceso de aprendizaje y beber de los grandes artistas”.
En la exposición hay algunas copias generales, pero también nos encontramos obras que se centran en el detalle, en las que cada artista ha querido extraer esa parte que les resulta más interesante. Martínez Vázquez resalta que “cada pintor tiene su manera de trabajar estas copias. Algo que se puede apreciar en la muestra, donde se ve claramente la mano de cada uno”.
Una gran ocasión para adentrarse en los entresijos de la pintura, de la mano de estas enseñanzas, de estos apuntes que “tomamos de la mano de Diego Velázquez y que invitan al espectador a viajar entre los misterios de las grandes obras de arte para descubrir la técnica y conocer en profundidad todo el proceso que hay durante la conformación del trabajo. El público puede ver algo distinto a lo habitual. Todas esas técnicas que quedan ocultas dentro de la enseñanza y que creo que es interesante poner en valor”, considera.
Esta muestra colectiva se ha realizado en el mes de septiembre, como pistoletazo de salida a la nueva temporada, ya que “cada uno de nosotros trabajamos también en nuestros propios proyectos y ya tenemos ideas en el aire para que, en un futuro muy próximo, podamos presentarlas”, concluye. De momento nos quedamos disfrutando de ‘La copia como proceso de aprendizaje en el arte’ que se puede visitar, con entrada libre, en las instalaciones del Taller de Arte “Art-Attelier” (Octavio Cuartero, 60) hasta el 24 de septiembre.
