El pasado domingo, 9 de mayo, un grupo de 5 amigos albaceteños celebraban un cumpleaños en Los Pinares del Júcar cuando fueron sorprendidos por el impacto de un rayo.
Las tormentas fueron las protagonistas durante la jornada del pasado domingo, pero estos albaceteños no se esperaban que un rayo “cayera a poco más de un metro de distancia de la mesa en la que estábamos sentados”, explicaban dos de las protagonistas de esta historia a El Digital de Albacete.
“Pensábamos que la tormenta iba a pasar rápidamente porque era una nube”, puntualizaban, pero “de repente cayó un rayo en el árbol que teníamos al lado”, relataba aún con el susto en el cuerpo.
Reconocían que “todo parece un poco de película pero fue lo que realmente nos pasó”. Describían el impacto del rayo como “un ruido ensordecedor”, e incluso señalaban que “la onda expansiva nos tiró al suelo y nos desplazó del sitio en el que estábamos”.
Asustados porque no sabían realmente lo que había ocurrido “cogimos la documentación y los teléfonos móviles para llamar a una ambulancia”, explicaban. Tras el impacto “nos levantamos del suelo aturdidos, mareados y no sabemos si llegamos a perder el conocimiento”.
“Era como si hubiera explotado una bomba y no sabíamos que había pasado”, manifestaban. Así, con la incertidumbre del momento “lo único que queríamos era salir de allí corriendo y no sabíamos si estábamos bien, mal o había alguien herido”.
Detallaban que “todo el mundo que estaba en el parque salía corriendo hacia la zona del aparcamiento de los coches porque escucharon el ruido del impacto del rayo”. Decidieron llamar a una ambulancia pero “nos estaba invadiendo la ansiedad”, motivo por el que debido a la adrenalina del momento, “uno de nosotros decidió ponerse al volante y conducir el coche hasta el Hospital de Albacete”.
Una vez en las dependencias hospitalarias fueron atendidos y afortunadamente ninguno presentaba graves heridas, salvo contusiones y dos días después del suceso “aún nos duele la cabeza y tenemos algo de angustia”. “Hemos tenido mucha suerte”, reconocían y añadían que “todavía estamos en shock y estamos procesando lo que nos ha pasado”.
Este lunes volvían a Los Pinares para asimilar lo que había ocurrido y cuando llegaron los trabajadores de medio ambiente les indicaron que “había ramas y trozos del árbol a más de 15 metros de distancia del lugar en el que impactó el rayo”. Del mismo modo confesaban que “el rayo tenía una dirección y por suerte nos esquivó”, y es que “si llega a caer más cerca no estaríamos contando esto”.
“Queremos que la gente sea más precavida de lo que fuimos nosotros”, apuntaban a El Digital de Albacete, y es que “solo pensábamos que iba a llover”. Sin embargo advertían que, “por muy de película que parezca, estas cosas pueden pasar a cualquiera”.
Definían su vivencia como “un milagro” y desde el pasado domingo estos albaceteños son conscientes de que “tenemos un segundo cumpleaños”.
/Marta López/
