En el pasado mes de marzo, en el Facebook de una tienda de antigüedades de Albacete, se anunciaba una imagen de una Virgen de los Dolores, de vestir y de pequeño tamaño como obra murciana del siglo XlX, de un seguidor de Salzillo o del círculo de Roque López. Luis Guillermo García-Saúco, del lnstituto de Estudios Albacetenses, pasó por el escaparate del establecimiento y pudo contemplar la imagen.
Pensando sobre la misma, inmediatamente la identificó como, efectivamente, de Roque López y como la realizada para Albacete, en el año 1807, para un fraile del convento de San Agustín de la villa, según el catálogo manuscrito de las obras del escultor, publicada por el Conde de Roche en 1889, en donde textualmente dice:
“Una Virgen de los Dolores de dos palmos, con peana para vestir, con pies para el Padre Fray Antonio Lozano de la Cuerda negra, en Albacete, en… 150 reales”.
Una imagen que, tras la Desamortización de 1835, al clausurarse aquel convento y convertirse en la Audiencia Territorial, pasó a la iglesia de La Purísima. En aquel templo permaneció hasta los desgraciados acontecimientos de noviembre de 1936, por lo que se había dado por perdida, según se señala, por ejemplo, en el libro “Francisco Salzillo y la escultura salzillesca en la provincia de Albacete” (1985). Afortunadamente, hoy esta escultura ha aparecido, casi casualmente.
Ante esta situación, García-Saúco se puso en contacto con el Delegado Diocesano de Patrimonio Cultural de la Diócesis y, con muy buen criterio, la propia Parroquia de La Purísima ha podido adquirir la imagen y, de este modo, recuperar -85 años después- para la parroquia y para la ciudad de Albacete esta pequeña obra de arte que nunca debió haber salido de donde estuvo.
Como bien es sabido, el escultor murciano Roque López (1747-1811) fue el discípulo y continuador del taller Francisco Salzillo, hasta los inicios del siglo XIX. Para Albacete se sabe que realizó diversas imágenes, también para el convento de San Agustín y otras para diversas localidades de la provincia, como Peñas de San Pedro, Alatoz, Almansa o Alcaraz, entre otras. Unas conservadas y otras no.
La imagen de la Virgen de los Dolores de Albacete repite, en pequeño tamaño, la conocida imagen que popularizó Salzillo y repitió sistemáticamente Roque López, con los brazos extendidos y la mirada clamante al cielo. Aquí se da la circunstancia de que las vestimentas de sedas, con bordados en oro, son de la época, incluso el puñal y la aureola estrellada, ambas de plata.
La imagen de la Virgen de los Dolores de Albacete repite, en pequeño tamaño, la conocida imagen que popularizó Salzillo y repitió sistemáticamente Roque López, con los brazos extendidos y la mirada calmante al cielo. Aquí se da la circunstancia de que las vestimentas de sedas con bordados en oro, son de la época, incluso son del momento el puñal y la aureola estrellada, ambas de plata.
De esta manera, tan discreta, Albacete ha recuperado para sí una pequeña obra artística, plenamente documentada, que los estudiosos del tema dieron por perdida. Quién sabe si en un futuro incierto aparecerán otras piezas muebles que en su momento no se valoraron, pero que forman parte de un Patrimonio cultural
/El Digital de Albacete/
