El Recinto Ferial de Albacete se convertía en un teatro al aire libre para celebrar este jueves, 29 de abril, el Día Internacional de la Danza. Un enclave inmejorable donde se han dado la mano, cultura y arte gracias a las promesas de esta disciplina artística en Albacete.
Este año, el autor del manifiesto del Día Internacional de la Danza, ha sido Friedemann Vogel, bailarín del Stuttgart Ballet, aludía en su texto al desafío que supone mantener vivo el movimiento, la danza, en tiempos de pandemia: “No hay contacto físico. No hay espectáculos. Sin público. Nunca en la historia reciente la comunidad de la danza ha sido desafiada colectivamente para mantenerse motivada, para hallar su razón de ser”, afirmaba el bailarín alemán. Un manifiesto al que han dado voz alumnos del Real Conservatorio de Danza perteneciente a la Diputación de Albacete.
Debido a la pandemia de coronavirus se han habilitado en este emblemático espacio de Albacete un total de 150 localidades para disfrutar de las coreografías que han preparado ambos conservatorios con motivo de este día tan especial. Además bailarines y bailarinas han protagonizado un vídeo con el objetivo de difundir su trabajo diario y su pasión por la danza.
Desde la Concejalía de Cultura se han puesto en marcha diversas iniciativas durante toda la semana para “dar visibilidad a la danza”, sostenía la responsable del área en el Ayuntamiento de Albacete, Maite García. Se trata de “sacar la danza de las aulas” y este jueves “es el turno de los Conservatorios de Albacete”.
Albacete cuenta con “seis bailarines que forman parte de la élite de la danza a nivel europeo llevando el nombre de nuestra ciudad con orgullo por todo el mundo”, y es que la “danza está muy arraigada en Albacete”, manifestaba. Así puntualizaba que “el universo de la danza es muy amplio y comprende diversos estilos”, y añadía que además de los conservatorios “en Albacete existen infinidad de academias de danza”.
“Hoy es un día para todos los amantes de la danza, un día para expresar su cariño hacia esta disciplina artística”, reconocía la concejal de Cultura. De este modo esperaba, “si la situación sanitaria lo permite, sacar más danza a la calles de Albacete”.
Alumnos del Real Conservatorio Danza de la Diputación indicaban a El Digital de Albacete que “la danza nos encanta y es nuestra forma de vida”. Apuntaban que su formación diaria la componen “la danza española, clásica y contemporánea”.
El año pasado debido al confinamiento impuesto por las autoridades sanitarias a causa de la pandemia de COVID-19 todos estos bailarines demostraban desde casa la vitalidad que supone la danza, incluso en los momentos más complicados. Este año, pese a las restricciones, los alumnos del Conservatorio Profesional de Danza ‘José Antonio Ruiz’ volvían a subirse al escenario mostrando los frutos de la disciplina y el trabajo diario.
Las mascarillas ocultaban las sonrisas de estos bailarines, pero sus ojos brillaban con luz propia mostrando la felicidad y satisfacción que es para ellos bailar. De este modo recordaban que “desde mayo de 2019 no nos subíamos a un escenario” y poder hacerlo de nuevo supone “un gran alivio y arrojar un poco de luz a toda esta situación”.
Definían la danza como “una vía de escape para poder olvidar todos los problemas y agobios”, y es que cuando bailan “es como si nos transportáramos a otra dimensión”. La danza también es “un lenguaje y una forma de expresión”, destacaban.
Actuaban en primer lugar los alumnos del Real Conservatorio Profesional de Música y Danza de Albacete poniendo sobre el escenario ubicado en el Recinto Ferial coreografías con un marcado acento folklórico. Y es que, las alumnas de 4º curso traían hasta este punto de la ciudad nuestro danza más característica: Las manchegas.
En concreto interpretaban las ‘Manchegas de Ánimo y Esperanza’, creadas por la Banda Sinfónica Municipal de Albacete y cantadas por María Rozalén, German Scasso y Juanma Cifuentes. Como colofón todos los alumnos y alumnas del centro, cantaban y bailaban ‘Bailaría’, una versión de ‘Mamma Mia!’ de la que es autora la profesora de Lenguaje Musical, Alma Jiménez.
Posteriormente los alumnos y alumnas del Conservatorio Profesional de Danza ‘José Antonio Ruiz’, demostraban sus aprendizajes con interpretado cuatro cuidadas piezas: ‘Mudéjar’, ‘Asturias’, ‘Tómatelo con calma’ y unos ejercicio de centro de danza clásica.
La actuación comenzaba con una muestra de ejercicios de port de bras, adagio y salto, y continuarán con una coreografía de Paco Romero inspirada en una estilización flamenca de la pieza ‘Asturias’, de Albéniz, que ha sido repuesta por Nuria Begerano y adaptada a cinco bailarinas, en una versión de piano interpretada por José María Gómez.
Continuaban con una pieza original creada para educar en valores como la paciencia y la vivencia saludable del proceso creativo, donde lo importante es disfrutar del camino, y no obsesionarse con la meta. La pieza, titulada ‘Tómatelo con calma’ ha sido ideada por la profesora Noemí Galindo López, en colaboración con el pianista José María Gómez Peña.
Cerrarán su intervención en este especial Día de la Danza con ‘Mudéjar’, una coreografía creada en el grupo de trabajo en clase de folklore, donde mostraban diferentes estilos y pasos folklóricos, pertenecientes a distintas comunidades autónomas, de Castilla-La Mancha, a Aragón, pasando por Murcia, Galicia y Asturias, entre otras. Así alumnos y alumnas de 5º curso de Danza Española, bajo la supervisión de la profesora Paqui Villa, creaban esta coreografía en la que resalta la música con aires de jota.
Albacete respira y siente la danza en un enclave inmejorable como es la Feria esperando volver a llenar teatros y disfrutar de esta disciplina uniendo el espíritu de público y bailarines.
/Marta López/Fotos: Ángel Chacón/
