/El Digital de Albacete/
El director general de Salud Pública de Castilla-La Mancha, Juan Camacho, ha celebrado que se pueda llegar a los días festivos de Semana Santa con una incidencia acumulada menor que la registrada para el puente de El Pilar, el 12 de octubre, pero ha pedido no bajar la guardia y ha alertado: «Cada vez que hay una mayor relajación, nos pegamos un batacazo».
En una conferencia de prensa en la que ha explicado los cambios en el calendario de vacunación al suspenderse la administración de AstraZeneca, Camacho ha recordado que a primeros de octubre, la incidencia acumulada a 7 días era de 166 casos por cada 100.000 habitantes y este lunes, era de 32, y en general ha destacado que «no se tenía una incidencia tan baja desde agosto».
También ha recordado que hace ya varias semanas que se levantaron las medidas excepcionales nivel 3 en toda la región que, entre otras restricciones incluía el cierre total de la hostelería y el cierre perimetral de todos los municipios, y ha calificado de «excelente noticia» que no haya habido un repunte de casos tras relajar las medidas.
Camacho ha señalado que esta estabilidad con tendencia a la baja en la incidencia acumulada refleja que las medidas que actualmente están en vigor «siguen funcionando» y ha incidido en que tener menos casos «facilita un control exhaustivo del diagnóstico, la trazabilidad y el rastreo».
De este modo, el director general de Salud Pública ha admitido que esta tendencia permite no ser optimistas, pues a su modo de ver ello sería «casi ser insensato», pero sí «estar expectantes en el lado positivo en cuanto a la evolución de las última semanas», porque posibilita «no tener tranquilidad, pero sí expectativa de que las cosas pueden ser más controlables» si se cumplen las medidas adoptadas a nivel nacional, sobre las cuales se ha mostrado «absolutamente a favor».
Por ello, y ante la posibilidad de si habrá una cuarta ola o se podrá frenar gracias a la baja incidencia actual y al avance de la vacunación, Camacho ha alertado: «Decir ‘per se’ que se va a evitar la cuarta ola, en absoluto, porque seríamos unos locos».