/El Digital de Albacete/
Muchos meses se ha estado hablando de ajustes en El Corte Inglés y al final la cadena de hipermercados ha confirmado que quiere realizar un recorte en su plantilla que afectará a casi 3.000 trabajadores en toda España en lo que es el primer plan de ajuste de la empresa en toda su historia.
A pesar que desde la Dirección Relaciones Institucionales en Castilla-La Mancha se había negado siempre esta realidad, lo cierto es que lo que señalaban algunos medios nacionales, de los que El Digital de Albacete se hacía eco, a pesar de las presiones y campañas interesadas de desprestigio, era verdad, El Corte Inglés estaba preparando recortes y estos se traducen ahora en una afectación que podría llegar al 5% de la plantilla.
El Digital de Albacete ha querido pulsar la opinión de algunos trabajadores de El Corte Inglés de Albacete tras la noticia que saltaba en el día de ayer y la incertidumbre y el desasosiego es la nota predominante en la mayoría de ellos.
Así, estos trabajadores consultados por este medio, que prefieren mantener el anonimato por temor a medidas disciplinarias, han señalado que poco a poco la situación en el centro que El Corte Inglés tiene en Albacete ha ido desembocando en menos personal e intranquilidad en unos empleados que leían noticias que desde el staff de dirección les negaban y atribuían a otros factores alejados de la información, pero que ahora la realidad ha confirmado que eran ciertas y dejan la credibilidad de los que antes las negaban en entredicho y sus argumentos en papel mojado.
Además, en Albacete se da otra circunstancia, y es que en los informes que se han ido filtrando a la prensa señalan que el centro que El Corte Inglés tiene en la Avenida de España siempre está entre aquellos que por su dudosa rentabilidad se encuentra con planes de reestructuración que algunos momentos le han llegado a situar en serias dudas de continuidad. Ya la cadena transformó su tienda ubicada en la calle Caba en un Outlet.
Los trabajadores esperan ahora que la dirección les den más explicaciones y aclare su futuro, algo que también demandan de los sindicatos, sobre todo de aquellos que no están “controlados por la empresa”, afirman.
3.000 EMPLEADOS FUERA
El Corte Inglés propondrá a los sindicatos un plan voluntario de bajas para un máximo de 3.000 empleados, de los cuales 2.500 serán trabajadores de los centros comerciales y 500 pertenecientes a los servicios corporativos, según han informado a Europa Press en fuentes conocedoras de esta decisión.
En concreto, el gigante presidido por Marta Álvarez abordará mañana con los sindicatos dicho plan de reordenación, que afectará a más de un 4% de la plantilla, integrada por unos 63.000 trabajadores.
Las mismas fuentes han explicado que el objetivo de dicho plan, dirigido a todos los trabajadores fijos de la empresa, es adaptarse a las nuevas circunstancias y adecuar los recursos de la empresa a las necesidades actuales en un contexto marcado por el Covid-19.
Tras la comunicación a los sindicatos, se creará la comisión negociadora que será la que establezca las condiciones del plan, cuya figura jurídica está por definir y entre las que podrían figurar bajas incentivadas.
La compañía ya se acogió en marzo de 2020 a un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por causa de fuerza mayor para un total de 25.900 empleados, tras decretar el Gobierno el estado de alarma para frenar la expansión del coronavirus.
Este ERTE afectó por tanto a casi el 29% de la plantilla total del grupo, que asciende algo más de 90.000 empleados. Así, se vieron afectados 22.000 trabajadores de los grandes almacenes de El Corte Inglés, 2.000 empleados de la cadena de moda Sfera y 1.900 empleados de Viajes El Corte Inglés.
Tras decretarse el primer estado de alarma en España para frenar la expansión del coronavirus, el grupo El Corte Inglés se ha visto obligado a cerrar todos sus centros en España, dejando únicamente operativas todas sus áreas de alimentación y productos de primera necesidad.
El Corte Inglés regresó al resultado bruto de explotación (Ebitda) positivo en el segundo trimestre de su ejercicio fiscal (entre el 1 de junio y el 31 de agosto), hasta situarse en 64 millones de euros gracias a la reapertura de tiendas y a la venta ‘online’, que registró un alza del 124% en este trimestre. La cifra de negocio consolidada durante este periodo se situó en 2.817 millones, con un beneficio bruto de 811 millones de euros.