/El Digital de Albacete/
La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Toledo tiene previsto juzgar este miércoles, día 27, al acusado de un delito de homicidio en grado de tentativa cometido en septiembre de 2015 en un bar de Torrijos (Toledo), cometido contra la supuesta víctima, tras iniciarse una discusión entre ambos, por el que el Ministerio Fiscal solicita la pena de 9 años de prisión.
Además, según el escrito de calificación del Fiscal, recogido por Europa Press, se prohíbe al acusado a aproximarse a la víctima a una distancia de 500 metros en cualquier lugar en que se encuentre, así como acercarse a su domicilio, lugar de trabajo y cualquier otro que sea frecuentado por él y comunicarse con él, durante el plazo de tres años.
El acusado se enfrenta también a una pena de un año y seis meses de prisión por un delito de tenencia ilícita de armas.
Por su lado, la víctima es, según el Ministerio Público, responsable de un delito de lesiones por el que se solicita la pena de tres años de prisión. También deberá indemnizar al acusado en la cantidad de 400 euros por las lesiones sufridas.
Los hechos ocurrieron sobre las 23.00 horas del día 18 de septiembre de 2015, cuando los dos procesados se encontraban en el bar ‘La Galería’ de Torrijos y el acusado le pidió un cigarro a esta persona, que éste no le dio, por lo que iniciaron una discusión, en el transcurso de la cual, con ánimo de menoscabar su integridad física, uno golpeó con una piedra al acusado en la cabeza.
A consecuencia de estos hechos sufrió herida inciso contusa en la parte parietal de la cabeza, necesitando para su curación, además de una primera asistencia facultativa, tratamiento médico consistente en sutura de la herida y posterior retirada, invirtiendo en su curación siete días, de los que dos días estuvo impedido para el desempeño de sus ocupaciones habituales, no quedando secuelas.
Finalizada la discusión ambos abandonaron el local pero poco después, sobre las 00.00 del día 19 de septiembre de 2015, el acusado se dirigió al domicilio de la pareja sentimental de la segunda persona situado en la misma localidad, tocando al timbre, asomándose a la ventana, momento en el que el acusado, con una pistola lista para hacer fuego y de la que carecía de la correspondiente licencia, asumiendo cualquier resultado de acción contra la supuesta víctima, con la clara intención de acabar con su vida, le apuntó, realizando cuatro disparos, que no llegaron a impactar contra su persona pero sí tres de ellos contra la barandilla metálica del balcón junto a la ventana.
Como consecuencia de estos hechos, el acusado abandonó rápidamente el lugar, sin lograr su propósito.
