/Modesto Colorado/
El árbol de Navidad, el belén o una corona en la puerta, son los típicos adornos que se suelen poner en las casas para ambientarlas durante estas fechas. Y es que, es imposible resistirse al espíritu de la Navidad, pero hay personas, como Antonio y Carmen, que elevan este espíritu al máximo nivel y deciden transformar su hogar en una verdadera casa navideña, tanto por dentro como por fuera.
Esta pareja, que lleva 64 años casados, son los propietarios de la popularmente conocida como la Casa de los Enanitos, situada en la calle Hermanos Jiménez, en el albaceteño Barrio de Fátima. Una calle que cada año cuando llega la Navidad se llena de niños ilusionados por ver esta casa en la que pueden ver figuras, adornos y guirnaldas, pero sobre todo luces que hacen de esta decoración algo especial y deslumbrante.
Es tanto el espíritu navideño de esta pareja, que Antonio asegura que cuando llega la Navidad Carmen se transforma, y afirma que “ya es conocida por muchos como ‘Mama Noel’, incluso en Nochebuena se disfraza y sale a darle caramelos a los niños”; aunque en esta ocasión fue diferente.
Y es que, 2020 ha sido un año difícil para todos, y por eso, Carmen y Antonio dudaban en si decorar su casa como tradicionalmente lo habían hecho durante décadas. “La pena flota en el ambiente”, dice Carmen, reconociendo que finalmente se han animado a llenar su casa de Navidad a petición popular. “No lo íbamos a poner y hemos decorado más por lo que nos decía la gente”, aunque el matrimonio puntualiza que, “dentro de casa, y a diferencia de otros años, no hay ningún motivo navideño”.
Nueva normalidad
La gente, extrañada de no ver la casa más famosa de la calle Hermanos Jiménez lucir en todo su esplendor, pedía a Carmen y Antonio que dieran alegría a esta Navidad agridulce. Normalmente, el matrimonio comenzaba a decorar a mediados de noviembre, pero este año, lo ha hecho apenas unos días antes de Navidad.
Se pusieron manos a la obra adaptándose a la nueva situación: en su fachada podemos ver a los tres Reyes Magos con sus correspondientes mascarillas, también a Blancanieves, el Príncipe, y por supuesto, a los enanitos. “En casa se cumple con la normativa”, asegura Antonio, y añade que “este año no hemos comprado gusanitos para repartir a los niños por la pandemia, y cualquier persona que entra en casa, incluidos mis nietos cuando vienen a visitarnos llevan su mascarilla”, y es que estas fiestas, a pesar de ser una familia numerosa, la celebrarán de manera reducida.
La Navidad y todo lo que ello conlleva es una tradición familiar para Antonio y Carmen, y es que como dice la albaceteña, “soy feliz en Navidad y me gusta compartir esa felicidad con todo el que pasa”. En estas fechas tan especiales, se han querido acordar de todas las personas mayores que se encuentran en residencias, enviándoles un mensaje de cariño y ánimo, y pidiendo a la sociedad que “cuide a los ancianos”.
La casa de los Enanitos se ha convertido en todo un emblema para la ciudad, que brilla con luz propia y es una fuente de cariño tanto para los albaceteños como para este matrimonio que vive la Navidad de manera intensa, pues como dice Carmen es “lo más bonito que hay y sus días están llenos de amor y paz”, también de ilusión, ya que, como cuenta Antonio, “algunas veces nos encontramos cartas a los Reyes Magos que los niños nos echan en nuestro buzón”.
Este año, además el jurado del primer concurso de decoración navideña de balcones, ventanas y fachadas, organizado por el Ayuntamiento de Albacete con la participación de la Federación de Asociaciones de Vecinos (FAVA), ha decidido conceder a Antonio y Carmen el primer premio dotado con 600 euros.
Finalmente y pese a todo, la casa de los Enanitos ha vuelto a brillar y con ella el espíritu de la Navidad. En el patio podemos ver a Papá Noel con su trineo y sus renos. Seguro que con semejante homenaje a esta casa llegó cargado de regalos muy merecidos para esta entrañable pareja.
