/Marta López/
La irrupción del COVID-19 en nuestras vidas el pasado mes de marzo ha supuesto un auténtico reto para los profesionales sanitarios al tener que hacer frente a una enfermedad prácticamente desconocida. Pero también ha frenado el diagnóstico y tratamiento de otras patologías entre las que se encuentra el cáncer.
Así, la presidenta de la Asociación Española Contra el Cáncer en Albacete (AECC), María Victoria Fernández, afirma que “es probable que se empiece a producir una saturación en relación al diagnóstico y tratamiento de pacientes con cáncer en Albacete”. Por el momento “no tenemos constancia de que se estén paralizando tratamientos”, indicaba, “aunque sí que es un hecho que a lo mejor se retrasa alguna consulta”.
Reconocía que “efectivamente hemos tenido y ha habido durante el anterior Estado de Alarma retrasos en la atención y el tratamiento, y si esto sigue la inercia que parece que esté tomando, a lo mejor nos encontramos en otras situaciones parecidas”. De este modo explicaba que “evidentemente hubo mucho retraso en los tratamientos y diagnósticos pero ahora mismo hasta que haya un nuevo repunte de coronavirus parece que está controlado”.
“Es cierto que la gente está muy nerviosa, como es normal y que están escuchando continuamente que se están retrasando operaciones en las poblaciones donde están en una situación epidemiológica más complicada, que por el momento no es el caso de Albacete”, manifestaba. Hasta la llegada de esta segunda oleada de COVID-19 “se ha ido retomando la actividad hospitalaria, pero en el momento que se sature todo por el coronavirus evidentemente se saturará también la atención de todas las enfermedades oncológicas, especialmente quirófanos y permanencias en el hospital”.
La actividad en la AECC en Albacete no ha parado pese a la pandemia y en los momentos más complicados del Estado de Alarma y del confinamiento “los psicólogos y la asistencia social ha estado en marcha”, subrayaba María Victoria Fernández. Unos servicios que se completaron con el de fisioterapia en el momento en el que se produjo el desconfinamiento. “Ahora compaginamos la asistencia presencial con videoconferencias”, reconocía, al tiempo que añadía que la AECC “ha iniciado una etapa de fisio para que los pacientes oncológicos no tengan que desplazarse acercándoles este servicio a casa con todas las medidas sanitarias”.
Una adaptación a la nueva situación que se produjo “en el minuto cero”, explicaba María Victoria Fernández. Motivo por el que “los tratamientos no han cesado y la evolución sigue siendo normal”. Además recordaba que en breve “comenzarán los trabajos de voluntariado porque los voluntarios han permanecido activos durante toda la pandemia”.
“Nos preocupan muchas cosas como el retraso en posibles tratamientos, cirugías y diagnósticos”, destacaba la presidenta de la AECC en Albacete. A lo que se une “el tema emocional que es tremendo porque los pacientes viven emociones en dos situaciones distintas, como es contraer otra enfermedad en paralelo con la tuya y el miedo que ello supone”.
De este modo subrayaba que “tenemos que luchar por intentar dar paz a los pacientes y sus familias en el transcurso de la enfermedad y a posterior, se tienen que sentir acompañados” y por ello “seguimos en plena actividad”. Así recordaba que desde la AECC “también hemos apoyado psicológicamente el duelo COVID”.
Igualmente pedía “no olvidar la investigación de las enfermedades oncológicas”, pese a la importancia que tiene en estos momentos la lucha por frenar el avance del coronavirus.
“El COVID-19 está saturando la atención a pacientes con cáncer y los diagnósticos de esta enfermedad”
La presidenta de la Asociación Costuras en la Piel en apoyo a la Unidad de Investigación de Cáncer en Albacete (ACEPAIN), Joaqui Alarcón, reconocía a El Digital de Albacete que “el COVID-19 está saturando la atención a pacientes con cáncer y los diagnósticos de esta enfermedad”. Una compleja situación a la que también sumaba “la reciente huelga de médicos” ya que indicaba que “no se avisó con el tiempo suficiente a los pacientes”.
De este modo apuntaba que “hay pacientes con patologías muy graves como puede ser el cáncer de colon que tienen que ir preparados previamente para hacerse una colonoscopia y al llegar a la consulta no han podido ser atendidos, lo que ha sido un auténtico problema”. Además también pasa con “el lifedema, o la revisión de cualquier otro tipo de cirugía”.
También destacaba que desde el inicio de la pandemia “se ha producido un aumento de pacientes con cáncer que han llegado hasta ACEPAIN”, y añadía que “los pacientes con cáncer están llegando a ACEPAIN sobre todo por la tardanza que tienen las pruebas, el retraso en las consultas, revisiones y cirugías”. Por todo ello recordaba que la detección y el tratamiento precoz “es vital porque el cáncer no espera, y evidentemente, cuanto más tarde se diagnostique o cuanto más tiempo se tarde en tratar será mucho peor”.
Toda esta situación genera “miedo en los pacientes” porque “la enfermedad continúa avanzando y temen que no haya solución”. Así, reconocía que de no tratarse a tiempo “se puede producir metástasis que que podrían haber evitado”.
ACEPAIN ha intentado adaptarse a la situación sobrevenida de la pandemia y “a día de hoy seguimos con los servicios de fisioterapia y psico-oncología”. Sin embargo reconocía Joaqui Alarcón que “hemos tenido que reinventarnos para recaudar los fondos necesarios para la contratación de investigadores con la puesta en marcha de una tienda gracias a la donación de un local en la calle Francisco Fontecha”. Pese a todo, aseguraba que “lo más importante es continuar manteniendo el servicio y el contacto con los pacientes”.
“Al inicio de la pandemia hubo una falta de diagnósticos pero fue porque las familias dejaron de ir a urgencias y eso derivó en que de repente empezaron a llegar pacientes con diagnósticos un poquito más avanzados”
Por su parte, el presidente de la Asociación de Familias de Niños con Cáncer (AFANION), Juan García, indicaba que “actualmente no hemos notado una saturación en relación al diagnóstico y tratamiento de los pacientes de cáncer pediátrico”. Sin embargo, si que reconocía que “al inicio de la pandemia hubo una falta de diagnósticos pero fue porque las familias dejaron de ir a urgencias y eso derivó en que de repente empezaron a llegar pacientes con diagnósticos un poquito más avanzados”.
Además, matizaba que el hecho de que “de momento no hayamos notado esta situación no quiere decir que en un tiempo nos llegue la queja de alguna familia relacionada con el retraso de alguna prueba de imagen”. Igualmente apuntaba que “el cáncer infantil en Castilla-La Mancha se encuentra siempre en la misma media rondando los 40 o 50 casos”, y añadía que “efectivamente nos dimos cuenta de que había meses en los que no había casos nuevos porque no se hacían diagnósticos debido a que durante los meses de confinamiento las familias dejaron de acudir a las urgencias hospitalarias”.
La situación provocada por el coronavirus “nos está afectando especialmente en el ámbito económico porque todo lo que antes hacíamos como las actividades benéficas que conllevaban aglomeración de gente como pilates, teatro, o carreras están totalmente eliminadas”, manifestaba el presidente de AFANION. Una situación económica que “a día de hoy no está repercutiendo en los servicios que ofrece la asociación pero puede ser que el año que viene sí lo haga y esto nos tiene preocupados”, destacaba Juan García.
Además, la pandemia también ha afectado a otros ámbitos de AFANION y es que “hemos tenido que dejar de ir a los hospitales para hacer cualquier tipo de voluntariado”. Una situación a la que añadía que “también hemos destinado una partida para proteger a nuestras familias con mascarillas y geles”.
“Ahora mismo lo que estamos viendo es normalidad”
Además, la presidenta de la Asociación de Mujeres afectadas de Cáncer de Mama y Ginecológico de Albacete (AMAC), Llanos Sánchez, exponía que “ahora mismo lo que estamos viendo es normalidad, pero sí que es verdad que en marzo, cuando estalló lo peor de la pandemia se anularon citas”. De este modo, matizaba que durante los momentos más complicados de la pandemia “se retrasaron muchas pruebas diagnósticas como mamografías, TACS o resonancias, lo que ha supuesto cierto retraso sobre todo en consultas de revisiones anuales, pero lo que es urgente se está viendo bien”.
“Hay que priorizar y ahora mismo en la situación que tenemos es la atención por parte de los sanitarios, que están al pie del cañón, para frenar lo antes posible el avance del virus”, manifestaba, “eso sí, sin dejar a un lado lo urgente en relación a otras patologías”. De este modo indicaba que hasta AMAC “han llegado pacientes diagnosticados en plena pandemia” y ponía de manifiesto “que sabemos lo complicado que es dar diagnósticos y trasladamos nuestra queja a Sanidad que los sanitarios tengan que dar este diagnóstico por teléfono”. Así exponía que “es muy duro que te comuniquen por teléfono que tienes un cáncer” y solicitaba “más delicadeza”.
Confesaba que “la situación es muy complicada para todas las asociaciones y también para AMAC que celebra su 20 aniversario en mitad de una pandemia teniendo que suspender infinidad de actividades para recaudar fondos muy necesarios”. También recordaba lo complicado que ha sido hacer frente a la enfermedad durante los momentos más duros del anterior Estado de Alarma porque “los pacientes oncológicos son personas de alto riesgo y tienen especial miedo a exponerse y contraer el virus”. Sin embargo “en plena pandemia tenían que ir al hospital a recibir sus tratamientos de quimio y tenían verdadero pánico”, pero desde AMAC “hemos tratado de estar siempre en contacto y apoyarlas para que no cortaran con estos tratamientos porque son esenciales”.
