/Marta López/
Con el objetivo de tener información más concreta sobre la evolución de la pandemia y saber cómo ha afectado o está afectando a nivel local y en los barrios de Albacete, el médico especialista en anestesióloga, el doctor Alfonso López, creaba el pasado mes de junio el ‘Observatorio de COVID-19 en Albacete’.
Según desprende el ‘Boletín Informativo nº 7’ del observatorio que comprende el periodo transcurrido entre el 1 de septiembre y el 23 de octubre en la provincia de Albacete se produjo un descenso de la incidencia acumulada a 14 días, hasta el pasado 11 de octubre. En este punto se observa un leve repunte que se hace mucho más acusado a partir del 17 de octubre.
Este aumento se prolonga hasta el día 23 de octubre y comparte una “incidencia acumulada a 14 días bastante similar a la registrada durante la primera semana de septiembre”, apuntaban en este Boletín Informativo. Como consecuencia de estos datos es especialmente “preocupante el ascenso de pacientes hospitalizados”, que según recoge el Observatorio de COVID se eleva “más de un 63% en la provincia desde el 11 de octubre”.
Igualmente preocupante es el registro de nuevos casos diagnosticados de coronavirus que también se eleva en más de 55% en las mismas fechas.
Albacete capital
En relación a la incidencia del COVID-19 en la capital albaceteña sostenían “con datos consolidados hasta el 16 de octubre como la incidencia acumulada a 14 días vuelve a despegar con 244 casos por 100.000 habitantes”. Sin embargo recordaban que esta incidencia se sitúa por debajo de la registrada en Castilla-La Mancha que asciende a los 339 casos por 100.000 habitantes.
Además, ponían en valor la herramienta puesta en marcha por Aguas de Albacete para medir la detección de SARS-CoV2 en aguas residuales de la ciudad. Según adelantaban este proyecto, denominado City Sentinel “se adelantan al menos una semana a los cambios de tendencia”, motivo por el que “podían aprovecharse perfectamente en la predicción de la evolución de contagios en Albacete”.
De este modo consideraban desde el Observatorio de COVID de Albacete que “difundir de manera puntual esa información a la población podría conllevar una mayor responsabilidad individual en la adopción de medidas de protección, así como una alerta temprana a las autoridades locales en la toma de decisiones”.
Por otra parte matizaban que en un informe elaborado por el Ministerio de Sanidad “la contribución de los casos detectados en el ámbito escolar es del 0,6%”. Una cifra que “contrasta con que la franja de edad con mayor incidencia de enfermedad siga siendo la que comprende de los 15 a los 29 años”, indicaban.
Así, consideraban que “lo más alarmante es que desde el 10 mayo el 40% de contagios se dan en un ámbito desconocido, es decir, la persona contagiada no sabe dónde se contagió”. Además, indicaban que “el 33% de los contagios fueron en el propio domicilio”.
Comunicación de casos de COVID-19 al Observatorio
“Lamentablemente, la posibilidad de comunicar casos de enfermedad tanto pasada como activa para ver su evolución geolocal, no ha sido acogida con entusiasmo por la ciudadanía”, señalaban, pese a “haber mostrado en la encuesta promovida desde el Observatorio, un mayoritario interés en poder conocer ese tipo de información”.
Desde el Observatorio de COVID de Albacete hacían “un llamamiento a la responsabilidad individual de la ciudadanía”, tras la nueva implantación del Estado de Alarma. Así creen “en la necesidad de información transparente y puntual para la autogestión personal”.
Por todo ello recordaban lo importante que es para evitar el contagio y la propagación del coronavirus hacer un correcto uso de mascarilla homologada y en buen estado, hacer hincapié en las medidas de higiene y ventilación de espacios cerrados, cumplir con la distancia y aislamiento social, por lo que proponen promover “las burbujas sociales que han demostrado éxito en países como Nueva Zelanda”, concluían.
