/El Digital de Albacete/
Albacete se despedía este fin de semana del padre y fundador de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) en la capital, Jaime Fedriani Gorría. Supone sin duda una gran pérdida en la familia de los cuidados intensivos de Albacete.
La del doctor Fedriani fue una vida dedicada en cuerpo y alma a la sanidad pública, vocación que heredaba de su familia. Llegó a Albacete en los años 70 para desarrollar su labor sanitaria e impulsó y dio vida a la Unidad de Cuidados del Hospital de Albacete, estando muchos años al frente de este servicio.
Fedriani también fue durante cerca de una década presidente de la Cruz Roja de Albacete y desarrolló su labor como profesional sanitario impartiendo también clases en la Escuela de Enfermería. Así, desde la propia Cruz Roja de Albacete confirmaban el fallecimiento del doctor recordando que “fueron muchos años los que estuvo al frente de la Oficina Provincial de Cruz Roja en Albacete y también como presidente de la Comisión Nacional de Garantías de Derechos y Deberes”.
Pero a pesar de todos estos años de dedicación, ponían de manifiesto que el doctor Fedriani “fue mucho más que eso”, y añadía que “más que un presidente, fue una persona con una inteligencia privilegiada y un carácter vivaz, que dejaba huella”. Así, detallaban que “nunca pasó desapercibido, su simple presencia ya te avisaba de que estabas ante alguien excepcional”. Reconocían que una de las características que lo definía y lo hacía único era “su sorprendente gran barba”, pero que su personalidad arrolladora “dejaba en un segundo plano” esta barba tan característica.
“De ideas avanzadas, casi siempre por delante” así calificaban desde Cruz Roja Albacete al doctor Fedriani, un médico que desarrolló su labor profesional “inyectando el suero de la modernidad y el desarrollo”. Del mismo modo aseguraba que el fallecimiento de Jaime Fedriani no supone su pérdida “porque siembre habrá algo que nos recuerde su paso por donde estuvo”.
Pero realmente no lo hemos perdido, porque siempre habrá algo que nos recuerde su paso por donde estuvo.
Ahora el encargado de poner en marcha la UCI en Albacete se despide siendo parte fundamental de la historia de la medicina en la capital. Gracias al doctor Fedriani la UCI ha salvado la vida de infinidad de pacientes, especialmente en esta época donde la pandemia del COVID-19 ha puesto de manifiesto lo vitales que son estas unidades y sus profesionales.
