No abra la puerta a desconocidos y evitará que le pase lo que a estos pobres e indefensos ancianos de Albacete

/Redacción/

Un clan del este que robaba en casas haciéndose pasar por servicios sociales y por una ONG han sido condenados en Zaragoza por los hechos delictivos que cometieron entre otras provincias, en Albacete.

En concreto, este tribunal ha condenado recientemente a uno de los acusados a “un alto y medio de prisión por formar parte del grupo criminal y sustraer joyas, dinero y distintos efectos de valor a residentes de avanzada edad”, recoge Noticias de Navarra. En concreto, la publicación relata que en Lodosa (Navarra), esta organización criminal sustrajo “joyas y se llevaron una tarjeta de crédito de una anciana” tras presentarse en su vivienda. Además, añaden que de la sustraída tarjeta de crédito “llegaron a sacar en un cajero de Tudela 600 euros, y después otros 500 en Zaragoza”.

Las cámaras de seguridad de ambas entidades bancarias fueron claves para reconocer a las presuntas autoras del robo a esta anciana y es que “forman parte de una organización criminal con vínculos familiares entre la mayor parte de sus componentes y que han sido juzgados o bien declarados en rebeldía por la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Zaragoza”. Así, según refleja una de las sentencias, “el grupo lo conformaban hasta una quincena de personas con vocación de carácter permanente e indefinido para la comisión de hechos delictivos”.

“Se asentaron a partir de enero de 2017 en una localidad de Ciudad Real, Torralba de Calatrava”, recoge la publicación, lugar al que trasladaban el botín que roban en viviendas de la provincia de Ciudad Real y Albacete. De este modo, para perpetrar los robos “formaban grupos de dos a cuatro personas, en las que las mujeres se hacían pasar por personal de los correspondientes ayuntamientos, de Servicios Sociales o de cualquier entidad con fines asistenciales”. Así se ganaban la confianza de sus víctimas, la mayoría personas de avanzada edad y tener acceso a las viviendas de estos ancianos.

Mientras tanto “el resto del grupo criminal permanecía en el exterior del domicilio a modo de alertantes para facilitar una rápida huida del lugar del robo a bordo de sus vehículos de gran cilindrada”. Gracias a un intenso trabajo por parte de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad se detectó la presencia “de los acusados en más de una veintena de localidades en las que cometieron hurtos y robos”.

“Recorrían la casa en busca del botín, pedían un vaso de agua para entretener a las víctimas y, de esta forma, una de las integrantes se dedicaba a encontrar los efectos de valor que encontraba a su paso”, recoge la publicación. En los municipios de Lodosa y Tudela este grupo criminal también desvalijó varias viviendas.

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