/Marta López/
El Atlas de mortalidad de Castilla-La Mancha 2003-2014 ha sido desarrollado por un grupo de investigadores de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) y sus colaboradores con el fin de estudiar la variación geográfica y temporal de la mortalidad en la región.
Este estudio muestra el número total de fallecidos y tasas de mortalidad por cada 100.000 habitantes de Castilla-La Mancha entre los años 2003 y 2014. Así durante este periodo la causa de fallecimiento más común en la región fue la enfermedad cerebrovascular con 18.766 casos, seguida de la enfermedad isquémica del corazón (18.436 casos), asma y otras enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores (10.546) y cáncer de tráquea, bronquios y pulmón (10.515).
Por sexos, el atlas refleja que la mayor causa de muerte en los castellano-manchegos fue la enfermedad isquémica del corazón con un total de 10.578 casos. Le sigue muy cerca como principal causa de fallecimiento entre el género masculino el cáncer de tráquea, bronquios y pulmón. Sin embargo, las causas estudiadas donde se registran un menor número de muertes de hombres son cáncer de huesos y cartílagos articulares Melanoma maligno cutáneo con 67 casos y cáncer de mama con 45 casos.
Por el contrario, entre las mujeres castellano-manchegas se produjeron un mayor número de fallecimientos relacionados con enfermedades cerebrovasculares (10.787 casos) y la enfermedad isquémica del corazón (7.858). Las causas estudiadas donde se registran un menor número de muertes de mujeres son otros tumores malignos respiratorios e intratorácicos y cáncer de huesos y cartílagos articulares Melanoma maligno cutáneo con 58 casos cada una de ellas, y cáncer de esófago con 84 casos.
Albacete
Los datos de mortalidad utilizados en este trabajo proceden del Instituto Nacional de Estadística (INE). De este modo, especifican que “estudiar directamente la mortalidad por municipio y año no nos informa sobre el riesgo relativo de la enfermedad puesto que esta será siempre más alta en los municipios de mayor población”. Por este motivo, para cada municipio, grupo de edad, sexo y año se ha calculado un número de casos “esperado”, que es igual a la tasa específica correspondiente por la población en ese municipio y año. De esta manera, comparando el número de casos observado al esperado es posible detectar municipios en los que el riesgo es alto.
Así, el Riesgo Relativo Estimado de fallecimiento por enfermedad cardiovascular en la capital Albaceteña pasó de un 1.31 en 2003 a un 0.752 en 2014. Siguiendo las causas más comunes de fallecimiento en la región comprobamos que en el caso de Albacete el Riego Relativo estimado de la enfermedad isquémica del corazón se fijaba en 1.17 en 2003 y en un 0.98 en 2014.
