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Esa es la pregunta que a día de hoy debería plantearse la sociedad y sobre todo, aquella que no supera los 30 años. En ellos está una de las llaves para poder derrotar antes que después a la pandemia de coronavirus que ha hecho temblar al mundo y son ellos, los jóvenes, los que deberían dar un paso al frente para demostrar su compromiso con la sociedad albaceteña.
Con los porcentajes en la mano es obvio que la inmensa mayoría de la juventud de Albacete está demostrando un comportamiento adecuado a los tiempos covid en los que vivimos y poca culpa tienen ellos cuando se generaliza y se habla de los jóvenes como un mal, pero lo cierto es que el pequeño porcentaje que pasa de todo y no respeta las medidas de seguridad impuestas por las Autoridades Sanitarias hace mucho más ruido que aquellos que sí las cumplen, y además pueden ser auténticos focos de contagio que desmadren los datos de infectados en su localidad de residencia.
El verano ha hecho que el ‘paciente tipo’ de coronavirus haya cambiado respecto al que predominaba en el tsunami de marzo o abril y ahora el perfil de los nuevos contagios ha bajado muchos años y cada vez son más jóvenes las personas que van pasando por los hospitales afectados de covid19.
Jóvenes y ocio nocturno van de la mano y tales han sido los brotes en toda España que el Gobierno de Pedro Sánchez ha cortado por lo sano y ha dado un nuevo hachazo al ocio nocturno para frenar los nuevos contagios, pero a tenor de los datos aportados por la Policía Local de Albacete, muchos jóvenes de Albacete decidieron cambiar el pasado fin de semana ‘La Zona’ por un ‘botellón’ cualquiera y hasta 53 personas resultaron sancionadas tras disolver la Policía Local de Albacete seis focos distintos de botellón en nuestra capital.
Pero esos 53 preocupantes sujetos no fueron los únicos que sacaron los pies del tiesto durante el fin de semana en lo que a no respetar a la peligrosa amenaza del coronavirus se refiere, ya que según datos de la Policía Local de Albacete, durante el pasado fin de semana, del viernes 21 de agosto al domingo 23, 7 personas con edades comprendidas entre los 18 y los 30 años resultaron detenidas por sus agentes por diversos delitos, teniendo el alcohol mucho que ver en varios de ellos.
Que los jóvenes den un paso al frente y velen por el futuro económico de su país y por la salud de sus padres y abuelos es fundamental en los tiempos que corren, y esperemos que con la llegada de septiembre y la ‘rutina’ del otoño, los jóvenes dejen de lado las numerosas concentraciones de personas, con o sin alcohol de por medio, que propicia y facilita el verano.
Ellos son el futuro y tienen el futuro en sus manos. Nunca mejor dicho.
