Ya no quedan confinados en el IFAB tras el traslado de los inmigrantes a diferentes lugares de Albacete

/Redacción/Fotos: Ángel Chacón/

Las instalaciones del IFAB ya no albergan a los inmigrantes confinados por un brote de COVID-19 y que han sido trasladados a diferentes pabellones de la ciudad, una tarea que se ha prolongado durante jueves y viernes, concluyendo en la tarde de ayer.

Así, los menos de 200 inmigrantes que permanecían en el IFAB, de los más de 400 que estaban en el asentamiento ilegal de la Carretera de Las Peñas cuando se inició el brote, ya están separados en grupos en instalaciones deportivas del IES Amparo Sanz, Colegio Virgen de los Llanos, Colegio San Antón, Colegio Ana Soto, Pabellón Polideportivo Jorge Juan e IES Andrés de Vandelvira.

Además, los positivos se encuentran aislados en el Pabellón del IES Tomás Navarro Tomás.

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A fecha del viernes, eran 43 los positivos por COVID-19 que dejaba este brote, aunque esa cifra se espera se vea incrementada tras las nuevas pruebas PCR a las que han sido sometidos los inmigrantes en cada uno de los pabellones.

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CONFINAMIENTO MÁS LARGO

Así, los supuestos 14 días de confinamiento se han alargado por la decisión del Ayuntamiento de Albacete de confinar a 200 personas en un mismo recinto, algo que la Junta de Comunidades indicó al consistorio que debería ser en grupos más reducidos, o panelando el IFAB o distribuyéndolos en diferentes pabellones por grupos, algo que finalmente se decidió tras el segundo motín de los confinados. Además, realizar actividades grupales no ha ayudado a mantener la distancia social recomendable.

Ahora, Bomberos de Albacete completan la desinfección del IFAB para poder cerrarlo y volver a su actividad en el momento en el que la Institución Ferial lo decida.

MENOS DE 200 CONFINADOS TRAS FUGAS Y ALTAS

Este nuevo confinamiento afecta a menos de 200 inmigrantes los que permanecían en el IFAB tras el segundo motín, ya que en este segundo incidente, y a pesar de que en un principio fuentes de Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha aseguraban que no se había producido ninguna fuga, El Digital de Albacete ha tenido acceso a información que apunta que entre 10 y 20 inmigrantes abandonaron el recinto del IFAB entre la madrugada del miércoles y las primeras horas de segundo motín sin regresar al recinto.

La Delegación Provincial de Sanidad de Albacete supervisó desde jueves el traslado de los temporeros que permanecían confinados en el IFAB a causa del brote de coronavirus declarado en el asentamiento de la carretera de las Peñas. Se trata de una de las medidas acordadas en sendas reuniones en las que participó el director general de Salud Pública de la Consejería de Sanidad, Juan Camacho, tanto en la Delegación provincial de Sanidad como en la IFAB, junto a representantes del Ayuntamiento de Albacete y la Subdelegación del Gobierno en esa provincia, para evaluar la situación de los temporeros. 

A media mañana del jueves se iniciaba este traslado con un amplio dispositivo sanitario, logístico y de seguridad en el que participan profesionales de la Delegación Provincial de Sanidad, SESCAM, Delegación Provincial de Educación, Ayuntamiento de Albacete, Diputación, Subdelegación del Gobierno, Policía Local, Policía Nacional, Bomberos de Albacete o Protección Civil. Asimismo, colaboran Cruz Roja y el Ejército, en el acondicionamiento de las nuevas localizaciones, así como Médicos del Mundo o ACAIM, en tareas de apoyo y mediación.

Tanto la Junta de Comunidades como el Ayuntamiento de Albacete han cedido espacios para alojar a estos temporeros, en grupos reducidos, de entre 20-25 personas, y que deben continuar con la cuarentena, bajo la supervisión de la Consejería de Sanidad.

Una vez finalizado el confinamiento en cada localización, las instalaciones utilizadas serán meticulosamente desinfectadas. En este sentido, en las últimas horas son numerosos los albaceteños que reclaman conocer los lugares donde son trasladadas estas personas, al igual que se dieron detalles de dirección y número de los confinados en la calle Baños. En este caso el Ayuntamiento de Albacete ha mostrado total opacidad en la información a la ciudadanía.

Esta medida pretende mejorar las condiciones de habitabilidad y evitar que se sigan produciendo nuevos contagios, a fin de poder dar por cerrado el brote lo antes posible. Para ello, los temporeros están siendo sometidos a una nueva PCR a su llegada a la nueva ubicación, con el fin de mantener lo más actualizada posible la situación epidemiológica de los inmigrantes confinados.

Por otro lado, según señalan asociaciones de inmigrantes, el Ayuntamiento de Albacete se habría comprometido a facilitar instalaciones para aquellos que permanezcan en la ciudad una vez termine el confinamiento.

LO ÚNICO QUE QUIEREN ES TRABAJAR

Cheikhou Cisse, portavoz del Colectivo de Apoyo al Inmigrante (Acaim), que colabora habitualmente con estos trabajadores, y hace hincapié en que los temporeros “lo único que quieren es trabajar porque, o trabajan o no pueden mandar dinero a sus familias”, ya que la mayoría son africanos, de Senegal y Mali sobre todo, aunque también de otros países como Marruecos.

Los incidentes se vienen produciendo desde que a mediados de julio se detectó un brote de coronavirus en el asentamiento ilegal de la carretera de las Peñas, en la antigua nave de Cereales Saltó, donde era habitual que hubiera hasta un centenar de personas, pero que en las épocas de mayor actividad en las campañas agrícolas -entre las dos naves adyacentes- podían ser unos 500 los temporeros que allí residían y donde incluso el Ayuntamiento había instalado un punto de acceso a agua.

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Al establecerse entonces, con el brote de COVID, restricciones a la movilidad para intentar frenarlo, cerca de un centenar de inmigrantes se saltó el confinamiento el domingo 19 de julio y protagonizó altercados en el Paseo de Circunvalación, unos hechos ante los cuales el alcalde de Albacete, Vicente Casañ, anunció la clausura del asentamiento y el traslado de los trabajadores, unos 230, a otro lugar, el IFAB.

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El miércoles se volvieron a registrar altercados al fugarse algunos de los temporeros después de llevar dos semanas con la movilidad restringida, sin poder ir a trabajar, unos incidentes que fueron controlados por la policía y adonde se trasladaron, además del alcalde, el subdelegado del Gobierno, Miguel Juan Espinosa, y el delegado de la Junta en Albacete, Pedro Antonio Ruiz Santos.

Finalmente, las administraciones acordaron reubicar a los trabajadores en distintos pabellones, en grupos de unas 20 o 25 personas, para iniciar un nuevo confinamiento de 10 días.

Ahora, en su nuevo emplazamiento, ha explicado Cisse, mantendrán entrevistas con trabajadores sociales que analizarán la situación de cada uno de los temporeros para ver qué pueden hacer cuando acabe el confinamiento.

Un nuevo confinamiento, ha señalado, que deberá durar otros 10 días más, contando desde ayer, y “siempre que vuelvan a dar negativo en PCR”.

Según los últimos datos de la Consejería de Sanidad, de ayer por la tarde, en este brote del asentamiento de Albacete hay 43 casos positivos de COVID-19.

Cisse ha indicado que el Ayuntamiento se ha comprometido a buscar la habilitación de algún lugar donde los temporeros que tengan trabajo puedan permanecer, una vez terminado el confinamiento, mientras dure la campaña.

El portavoz de Acaim ha asegurado que los altercados “no están justificados en ningún caso”, pero ha añadido que también se han podido dar “si ha faltado información, porque ayer muchos esperaban poder irse ya, al cumplirse los 15 días y no entendían que no puedan ir a trabajar todavía”.

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